Antes de la llegada de los smartphones, videojuegos y tecnología, existía un juego que era muy común entre los niños y jóvenes de nuestro país. Consistía en ir buscando vochos amarillos en la calle, y el primero que lo viera debía decir “vocho amarillo” y golpear a la otra persona en el brazo antes de que el otro.
De acuerdo con la página de la Volkswagen, hace 19 años que el Vocho se dejó de producir en México y el mundo; sin embargo, sigue en la mente de los mexicanos con este tipo de juegos e imágenes que hacen que este clásico nunca muera.
Después de una exhaustiva búsqueda por parte de Volkswagen en México, no se encontró el origen exacto de este juego. Sin embargo, hay indicios que aseguran que este juego se originó en Estados Unidos.
Fue en 1949 cuando llegó por primera vez el Vocho a Estados Unidos, a mediados de la década de los 50’s, convirtiéndose en uno de los autos que más destacaba por sus grandes cilindradas, formas cuadradas y mayor tamaño.
El término "slug bug” se usó por primera vez para describir a un Vocho en el medio Arizona Republic el 6 de mayo de 1964. Ahí, un columnista escribió una pregunta y respuesta con su hija, quién le dijo: "Creo que los slug bugs son lindos".
Los norteamericanos utilizan ambos nombres para referirse al juego, sin embargo, Volkswagen of America, relata que su uso se distingue por regiones: "punch buggy" se usa más en zonas costeras, mientras que "slug bug" puede encontrarse en los estados del medio oeste y del sur.
Aunque no se sabe cómo llegó el juego a nuestro país, sin duda los mexicanos le pusimos nuestro toque especial.
Este juego se popularizó durante la década de los 90's, cuando los vochos eran los carros de moda, en aquel entonces se fabricaron de muchos colores; sin embargo, el color que menos pintaban era el amarillo, según para evitar la confusión con los taxis de Nueva York.
Por eso, algunos decían que ver un Vocho amarillo también era una señal de "buena suerte".
Las reglas del juego son muy sencillas, y todos y todas las recordamos, pero si tú eres de los centennials y no sabes de qué hablamos, acá te explicamos:
Primero debes estar muy atento, observando a tu alrededor y si te encuentras uno de estos autos debes gritar ¡Vocho amarillo!, y darle un pequeño golpe en el brazo a tu acompañante.
Algunos añaden más reglas, por ejemplo, que al dar el golpe tenías que sobarle el brazo a quien lo recibía, si no te lo podían regresar. También podías salvarte del golpe si levantabas los pulgares antes de recibirlo (cuestión de tener reflejos rápidos).
Como lo mencionamos con anterioridad, quizás ahora no puedas comprar un vocho, pues fue discontinuado, pero tal vez puedas inventar un nuevo juego que te ayude a revivir tu niñez.