El ponche es una bebida clásica e infaltable durante la temporada de frío, especialmente en Navidad y Año Nuevo. Esto se debe, sin duda, a los beneficios que se le atribuyen, por lo que es conveniente que quienes no lo acostumbran o rehúyen su consumo conozcan qué tan saludable es el ponche.
Al respecto, cabe mencionar que se trata de una bebida ancestral que data de tiempos posteriores a la Conquista, cuya receta ha pasado de generación en generación.
Los ingredientes pueden variar, pero en general se elabora con frutas frescas o secas combinadas con especias, panela o piloncillo, y, en algunos casos, miel. Lo cierto es que es una bebida altamente valorada.
De acuerdo con referencias históricas, el ponche de frutas tiene sus orígenes en los antiguos pueblos persas, quienes consumían una bebida muy parecida llamada “panch”, preparada con agua, limón, hierbas, azúcar y ron.
La costumbre llegó a Europa, donde sufrió algunos cambios, incluido su nombre: en inglés se le llamó “punch”, y en España se adaptó como “ponche”.
Lo evidente es que se consume tanto por su sabor como por su capacidad para mitigar los efectos del frío.
¿Cuáles son los beneficios de consumir ponche?
Entre los principales beneficios de tomar ponche destacan:
- Constituye una excelente y deliciosa manera de consumir vitamina C.
- Aporta vitaminas como la A, además de calcio, hierro y potasio.
- Ayuda a combatir gripes, resfriados y otros padecimientos del sistema respiratorio, comunes en épocas invernales.
- Las frutas con las que se elabora el ponche contribuyen a prevenir ciertas enfermedades.
- Es una bebida con un elevado valor nutritivo.
- Los ingredientes del ponche, en mayor o menor proporción, aportan fibra si se consumen las frutas que contiene.