En el estado de Puebla hay cerca de 10 presas, como la de Necaxa, de la Soledad y Tenango, entre otras, pero para la Inteligencia Artificial hay una que destaca como la más bonita, la cual se puede conocer y El Universal Puebla te dice cuál es y por qué.
Las presas son estructuras hidráulicas de grandes dimensiones que permiten almacenar o retener agua para aprovecharla en actividades como el riego, el consumo humano, la generación de energía eléctrica, entre otras.
Estas presas también sirven para el control de inundaciones, porque guarda el agua de lluvia y los escurrimientos de las montañas, así evita que baje hasta las comunidades que se sitúan en terrenos planos y cercanas a ríos.
Durante la temporada de ciclones tropicales, de mayo a noviembre, las lluvias aumentan en varias regiones del país, y en Puebla no es la excepción, así que las presas son un aliado también para la recarga de los mantos acuíferos.
Para la Inteligencia Artificial es la presa Manuel Ávila Camacho, también conocida como la presa de Valsequillo, la más bonita de Puebla.
¿Por qué es la más bonita de Puebla?
Para la IA no solo es por su belleza natural, sino también por su entorno y su importancia histórica.
Aquí hay cinco razones que, según la Inteligencia Artificial, la hacen especial:
Entorno natural
Destaca que la presa de Valsequillo está rodeada de montañas y vegetación que, junto con el cuerpo de agua, crean un paisaje hermoso y tranquilo.
La variedad de aves y la flora local le dan un toque de vida y biodiversidad que la hacen especial.
Actividades recreativas
La presa ofrece actividades como paseos en lancha, kayak y pesca, además de ser un sitio popular para días de campo y para pasar un tiempo en contacto con la naturaleza, lo cual la convierte en un lugar atractivo para turistas y locales.
Cercanía a sitios turísticos
Posee una ubicación estratégica, ya que está cerca de otros lugares de interés turístico como el Pueblo Mágico de Atlixco, el parque de conservación Africam Safari o el municipio de Tecali de Herrera donde los pobladores se dedican a elaborar artesanías con ónix, lo cual hace que visitar la presa sea parte de una experiencia completa en la región.
Puesta de sol y reflejos en el agua
Los atardeceres en la presa Valsequillo son impresionantes, ya que el agua actúa como un espejo natural, reflejando los colores del cielo. Esto, combinado con las montañas de fondo, crea un paisaje digno de una postal.
Patrimonio cultural
Al estar construida en los años 40 como parte de un proyecto hidráulico nacional, la presa tiene una importancia histórica en el desarrollo de Puebla y su agricultura. Esto le da un valor cultural, además del natural.
Estas características en conjunto la hacen un lugar único en Puebla, donde se mezcla la belleza natural con la historia y la oportunidad de disfrutar actividades al aire libre.
¿Cómo llegar a la presa de Valsequillo?
Una de las principales tareas de la presa de Valsequillo es dotar de agua de riego a tierras de cultivo en los municipios de Atoyatempan, Cuapiaxtla, Huitziltepec, Molcaxac, Huixcolotla, Miahuatlán, Hueyotlipan, Tecali, Tecamachalco, Tehuacán, Tepanco de López, Tepeyahualco, Tlacotepec de Benito Juárez, Tlanepantla y Tochtepec.
Además de dotar de agua, que se desfoga de manera regulada de marzo a mayo, también sirve de escenario para visitar y tener contacto con la naturaleza, por lo que se puede ver muy de cerca cabañas, algunas flotantes, para el descanso de fin de semana.
Para llegar a la presa de Valsequillo hay que dirigirse a la zona sur de la ciudad de Puebla, por el camino al Batán, ya sea en auto particular o en unidades del transporte público.
La distancia promedio es de 35 minutos, pero el tiempo valdrá la pena porque al llegar encontrarás increíbles ejemplares de flora y fauna del lugar.