La Casa de Oro, también conocida como la Capilla de la Virgen del Rosario, es una obra maestra del barroco novohispano en México. Construida en el siglo XVII por frailes dominicos, esta capilla se distingue por su deslumbrante belleza y su rico simbolismo religioso, tanto así que es considerada como la “Octava Maravilla del Mundo”, pero ¿por qué? Aquí te lo contamos.
Según la Gerencia del Centro Histórico y Patrimonio del Ayuntamiento de Puebla, la construcción de la Capilla de la Virgen del Rosario comenzó en 1650.
Durante cuatro décadas, los frailes dominicos dedicaron su esfuerzo y habilidades para erigir esta magnífica obra de arte y devoción. Finalmente, en 1690, la capilla fue completada, convirtiéndose en un monumento emblemático del barroco novohispano en México.
Fue llamada "La Casa de Oro” o “Domus Aurea”, debido a que prácticamente todo su interior estaba revestido de láminas de oro de 24 quilates. Este esplendor llevó al dominico Fray Diego de Gorozpe a calificarla como la "Octava Maravilla del Nuevo Mundo" en 1690, en un documento que hoy reposa en la Biblioteca Palafoxiana.
¿Qué otros nombres recibe la Capilla del Rosario?
Como lo mencionamos con anterioridad, la Casa de Oro fue considerada en su época como la Octava Maravilla del Mundo, hasta que en 1979, durante la primera visita del Papa Juan Pablo II a México, la catalogó como el "Relicario de América”. No obstante, 8 años más tarde, en 1987 fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO.
¿Cuánto oro tiene la Capilla del Rosario?
Según el portal “México desconocido”, el oro que se usó para decorar esta iglesia llegó de Guanajuato, de una mina llamada La Valenciana. Se dice que el dueño de la mina, Antonio de Obregón, era muy devoto de la virgen, porque aseguraba que le había salvado la vida y en agradecimiento, él se encargó de llevar el oro necesario a Puebla.
El proceso de trabajo del oro para el revestimiento de la Capilla de la Virgen del Rosario implicaba una meticulosa labor por parte de los orfebres de la época. El oro en forma de polvo de 24 quilates se combinaba con polvo de cobre en proporciones específicas para crear un compuesto que luego se solidificaba.
Este compuesto se laminaba manualmente, envuelto en piel, hasta obtener láminas extremadamente delgadas, de apenas unas pocas micras de grosor.
La durabilidad y el brillo perdurable de la Capilla de la Virgen del Rosario se deben no solo a la pureza del oro utilizado en el revestimiento, sino también a las técnicas empleadas para fijarlo. Los expertos destacan que se utilizaron ingredientes como miel, clara de huevo, leche y jugos de áloe y nopal en el proceso de fijación.
El resultado final fue un revestimiento de oro brillante y duradero que adornaba las paredes interiores de la capilla, creando un efecto deslumbrante que aún hoy asombra a los visitantes.
Estas técnicas tradicionales han demostrado ser efectivas para mantener la belleza y el esplendor de la capilla a lo largo de sus más de tres siglos de existencia, convirtiéndola en una verdadera joya arquitectónica y espiritual.
¿Qué hay dentro de la Capilla del Rosario?
En el interior de la capilla hay grandes lienzos pintados por José Rodríguez Carnero (1649-1725), los cuales representan la vida de Jesús.
Los relieves que revisten cada uno de los muros, las bóvedas y las pilastras muestran una gran variedad de ángeles, figuras vegetales y animales.
La capilla también cuenta con detalles decorativos bastante extraños como las figuras de cuatro perros con antorchas en sus hocicos que vigilan el lugar bajo la leyenda de Dominis canis, los guardianes de Dios, los pelícanos que simbolizan a Cristo; y dos sirenas que hacen alusión a los peligros que enfrentan los navegantes en el mar.
De acuerdo con Francisco de la Maza (1913-1972) en su escrito “La decoración simbólica de la Capilla del Rosario de Puebla”, estas sirenas se encuentran al final de las pilastras que sostienen la segunda bóveda.
Estos seres mitológicos tienen su razón de ser, puesto que la Virgen del Rosario, desde fines del siglo XVI, es patrona de los navegantes y, por ello, en esta capilla se recuerda al mar precisamente con sirenas, representando el peligro, la tempestad y el pecado del cual salvaba la Virgen del Rosario a sus hijos marineros.
Cabe destacar que en varias ocasiones, la capilla ha recibido restauraciones. De 1967 a 1971, un equipo de restauradores con el apoyo de la fundación Mary Street Jenkins realizó un trabajo de restauración en toda la capilla.
En 2008, fue nuevamente rehabilitada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), usando fondos federales y entregando los trabajos en 2008.
Después de los sismos de 2017, UNESCO México realizó recorridos con representantes del gobierno federal y estatal a fin de conocer el proceso de restauración y mantenimiento del templo de Santo Domingo y la Capilla del Rosario.
¿En dónde está la Capilla del Rosario?
Está ubicada en la calle 5 de mayo y 4 Poniente en el Centro Histórico de Puebla.
Está abierta de lunes a domingo, pero debes consultar sus horarios en su página de Facebook (https://www.facebook.com/CapilladelRosarioPuebla?locale=es_LA), ya que estos pueden variar dependiendo de la semana.