El transporte público del país sigue dando de qué hablar, luego de que se hizo viral el caso de un joven que tuvo que caminar sobre los asientos para poder bajar de un camión que viajaba saturado de pasajeros.
Los hechos ocurrieron en la ciudad de Los Mochis, Sinaloa, el pasado 29 de agosto cuando alumnos de diversos niveles educativos retomaron las clases presenciales.
La realidad no es muy diferente en Puebla, donde según una encuesta realizada por Moovit, los usuarios deben esperar más de 45 minutos para abordar el transporte y viajan a través de este medio entre 45 y 2 horas al día.
Este 2022 entró en vigor el nuevo Reglamento de la Ley de Transporte del Estado de Puebla que señala lineamientos para los prestadores del servicio público.
El reglamento señala que existen obligaciones para prestadores de servicio de transporte público, mercantil y ejecutivo.
Sus unidades deben de cumplir con características de diseño, cromática, identificación de vehículos, capacidad, seguridad laboral, conducta de los conductores, condiciones para el pago de tarifas y la responsabilidad civil por daños con terceros.
En el caso del transporte público se establece que deben cumplir con itinerarios y rutas, horarios y frecuencias, imagen para su identificación, contar con placas y calcomanías, así como con un número de serie.
Otro apartado del reglamento aborda lo relativo al seguro obligatorio y a condiciones físicas de las unidades para garantizar la seguridad de los usuarios del transporte público.
Algunas de las especificaciones técnicas son que las unidades no pongan en riesgo a los pasajeros, asientos que se puedan limpiar, puertas suficientes para las ascenso y descenso, contar con estribos y con ventanillas amplias para garantizar la ventilación.
Se prohíbe que estas unidades de transporte público utilicen torretas, luces neón, pantallas electrónicas luminosas para identificarse, accesorios en los rines que puedan ocasionar daños y válvulas de escape ajenas a los vehículos.
En cuanto a la antigüedad que en el caso de transporte público local debe de tener máximo 10 años y que en las rutas que compartan otros municipios se puede alcanzar hasta 12.
Los concesionarios deben garantizar aptitud para el manejo, capacitación de choferes, seguridad laboral de los mismos y el apego a exámenes de alcoholemia y toxicológicos.
En otros apartados también se señala que el incumplimiento del reglamento puede ocasionar la pérdida de las concesiones y también los criterios para otorgar las nuevas autorizaciones.