El COVID ha tenido varias variantes desde su descubrimiento, una de las que más ha llamado la atención de los expertos es el FLiRT, misma que hoy es la predominante en Norteamérica, esto según los especialistas.
La primera vez que se detectó el FLiRT, fue detectado en Estados Unidos cuando los expertos se encontraban haciendo vigilancia de aguas residuales. Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) han dado a conocer que esta variante representa el 25% de los casos.
Los expertos se encuentran investigando la nueva variante del COVID, sin embargo, los estudios han señalado que el FLiRT, afecta las proteínas de pico del coronavirus, lo que podría hacer que esta enfermedad sea menos capaz de infectar las células del humano; debilitando al COVID.
Se nos explica que su nivel de contagio no es tan grande como algunas otras variantes, pero al superar nuestras defensas puede aumentar la proporción. Siendo la nueva variante resistente a las vacunas, por lo que su peligrosidad aún es incierta.
Los CDC estiman que durante estas semanas que nos aproximan al verano, esta variante podría estar provocando más infecciones en Texas y Puerto Rico, en personas con mayor riesgo como son mujeres embarazadas y niños que son lo más susceptibles de contagiarse.
Los expertos han dado a conocer los síntomas de esta enfermedad con el fin de que las personas puedan identificarla; es importante señalar que el contagio no es peor que alguna otra variante de este virus.