El Servicio de Administración Tributaria (SAT) ha dado a conocer una nueva disposición fiscal que se centra en las compras realizadas a través de plataformas digitales internacionales como Amazon, Shein, Temu y Shopee. Esta normativa se aplica a aquellas transacciones que se efectúan utilizando tarjetas de bancos como BBVA, Banamex y otros. La medida busca regular y supervisar el comercio electrónico, asegurando que las adquisiciones en estas plataformas cumplan con las obligaciones fiscales correspondientes. Si quieres saber más, no te pierdas esta nota de El Universal Puebla.
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Esta medida tiene como objetivo combatir la evasión fiscal y mejorar la recaudación en el sector del comercio electrónico. Al regular las transacciones realizadas en plataformas digitales internacionales, se busca cerrar brechas en la fiscalización y asegurar que todas las compras realizadas por los ciudadanos mexicanos contribuyan al erario público. Esto no solo fortalecerá la capacidad del Estado para financiar servicios y programas, sino que también fomentará una mayor equidad en el cumplimiento de las obligaciones fiscales entre los diferentes actores económicos.
Este nuevo tributo se aplicará a los ciudadanos mexicanos que realicen pagos con tarjetas de crédito o débito en sitios web extranjeros. Anteriormente, muchos de los artículos adquiridos en estas plataformas no estaban sujetos a impuestos, lo que generaba una discrepancia en la recaudación fiscal. Con esta normativa, se busca garantizar que las transacciones cumplan con el Impuesto al Valor Agregado (IVA) del 16% y, en ciertos casos, con el Impuesto Sobre la Renta (ISR). Esta medida tiene como objetivo aumentar la transparencia y equidad en el comercio electrónico, asegurando que todos los consumidores y vendedores cumplan con sus obligaciones fiscales.
Los precios finales de los productos aumentarán, ya que las plataformas trasladarán el costo de los impuestos al consumidor. Este ajuste en los precios también promoverá una mayor formalidad en las transacciones en línea, al buscar establecer condiciones de competencia más equitativas entre las plataformas nacionales y extranjeras. Al incorporar el cumplimiento fiscal en el comercio electrónico, se espera que tanto los consumidores como los vendedores se enfrenten a un entorno más justo y regulado, lo que podría beneficiar al mercado local y a la economía en general.
El SAT ha indicado que las tiendas en línea que operan como intermediarias deben registrarse en el Registro Federal de Contribuyentes (RFC) y retener los impuestos correspondientes en las transacciones en las que participan.
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Además, para la deducción de gastos en servicios contratados en el cálculo del Impuesto Sobre la Renta (ISR), será necesario demostrar que el servicio ha sido efectivamente prestado. A partir de octubre de 2024, el SAT pondrá en marcha nuevos programas de auditoría y revisión con el fin de garantizar el cumplimiento de estas disposiciones. Estos programas se enfocarán en identificar y sancionar prácticas de contrabando, así como la evasión y elusión fiscal, buscando así fortalecer la recaudación y la transparencia en el comercio electrónico.