Según la Secretaría de Turismo de Tlaxcala, en el estado de Tlaxcala persiste una antigua leyenda que data de más de 500 años. Esta leyenda habla de mujeres conocidas como Tlaltepuchi, quienes poseían la capacidad de modificar su apariencia, similar a los nahuales.
El término "Tlaltepuchi" se ha interpretado como "sahumador luminoso". Estas mujeres, según la leyenda, eran capaces de transformarse en animales y otras formas para llevar a cabo sus malévolas acciones. Una de las características más aterradoras de las Tlaltepuchi era su capacidad para chupar la sangre de los bebés hasta matarlos, un acto que les confería un aura de terror y misterio en las comunidades donde se les creía presentes.
Según relatos de los mismos habitantes de Tlaxcala, de los 60 municipios que hay en el estado, existen al menos 8 municipios cuyas leyendas sobre las Tlaltepuchi son más destacadas. Estos municipios son:
La usuaria de Facebook Eli Shabat de Gante cuenta: contaba mi abuela que la güila, que era como una guajolota, se quería llevar a mi papá ,y ella se lo pudo quitar y también le quería absorber la "mollera".
Un usuario de Facebook relata: “Dormían a los papás del niño con una especie de humo y después aunque el niño llorara no lo escuchaban. Así murió un sobrino de mi abue. Aunque si no recuerdo mal, el nombre correcto para estas brujas es TLAHUELPUCHI.”
La usuaria de Facebook Rosalba Sarmiento relata: “Así eran las brujas, yo viví en la Candelaria Teotlalpán y seguido las veíamos de un cerro a otro, ahí de las 11 de la noche volaban. Y sí, igual querían chuparse a mi hermanito recién nacido.”
Otro usuario de Facebook identificado como Jiho Huerta comenta “El fallecimiento de un recién nacido, hijo de mi primo, dicen que lo chupo la bruja. A mi padre, una tarde noche del 12 de diciembre de hace muchos años, se lo llevó el náhuatl y regresó a la madrugada, todo raspado.”
Otro usuario de Facebook llamado Kwawkwawitl Maravilla relata: Yo soy de san Felipe Ixtacuixtla, y a mi abuelita literalmente le ganó una niña a la bruja, me platica que encontró a la bebe bajo la cama en la mañana, toda mordida y de color pálido.