A 40 minutos de Cuetzalan se encuentra el pueblo de San Miguel Tzinacapan, junta auxiliar de este Pueblo Mágico. Este poblado oculto en la montaña alberga un paraíso natural de pozas de aguas cristalinas y misteriosas grutas que son capaces de multiplicar el dinero que le dejes como ofrenda.
La caverna el Cántaro es una gruta muy particular, pues además de poseer especies endémicas de la región, cuenta con unos cántaros que según los guías pertenecen a la cultura totonaca.
Se dice que fue nombrada así por los pueblos originarios cuando ocupaban las grutas como refugio de la revolución de Puebla, usando sus cántaros de barro para la conservación de agua, portando agua primigenia y haciendo uso para la magia blanca orando al padre de la naturaleza, Tlaltecuhtli.
Otra de las historias que cuentan los habitantes de esta comunidad y que es muy similar, menciona que hace muchos años los totocanas guardaban oro y cosas preciosas en estos jarrones, los cuales estaban incrustados en las rocas. La leyenda dice que las personas que guarden su dinero o su oro en estos jarrones les van a generar abundancias.
De los cinco jarrones, actualmente queda 1, así que si te animas a visitar esta gruta, puedes intentarlo y dejarle como ofrenda algunas monedas.
Cerca de esta zona se encuentra la famosa poza “Pata de Perro”, el Cañón Sagrado y la gruta la Garganta del Diablo.
¿Cómo llegar a la Gruta el Cántaro?
La gruta el Cántaro se encuentra en Ayotzinapa en la comunidad de San Miguel Tzinacapan. Está a aproximadamente a 10 km del centro de Cuetzalan.
Para llegar deberás de toma el camino Cuetzalan – San Miguel Tzinacapan y desviarse en la salida de Ayotzinapan. Después debes descender del vehículo y caminar los 40 minutos entre senderos, debido a que no pueden ingresar los coches al ser un camino estrecho.
El camino no es apto para autos compactos y el acceso está permitido sólo con el equipo adecuado, otorgado por un guía profesional.
Para mayores informes comunícate a los números 233 127 40 48 y 233 126 1385.