La determinación del Club América de jugar como local en el Estadio Cuauhtémoc no es casual. Sin duda, la directiva y el cuerpo técnico evaluaron con detenimiento las eventuales ventajas que podría representar recibir al Monterrey como local en Puebla.
En primera instancia, hay que considerar el resultado positivo que obtuvo no solo en el marcador, sino también en lo que respecta a la afición en el partido de la jornada 16 del Torneo Apertura 2024, ante los Tuzos.
De ahí que, con los antecedentes previos y casi inmediatos, la directiva del Club América no haya dudado en jugar el partido de ida de la final del Torneo Apertura 2024 como local en la cancha del Estadio Cuauhtémoc.
En primer lugar, la cercanía geográfica de la Ciudad de México con la de Puebla es propicia para que la afición del Club América se desplace a la Angelópolis para presenciar el partido. Además, hay un número considerable de seguidores en Puebla que evidentemente asistirán al Estadio Cuauhtémoc para apoyar al equipo dirigido por André Jardine.
En esencia, los jugadores del Club América estarán respaldados por la afición, con un estadio colmado de seguidores que harán que los Rayados se sientan presionados.
Por otra parte, el hecho de que Monterrey buscará culminar el partido sin un marcador adverso permite prever que mantendrá una estrategia basada en el contragolpe, mientras que el América está obligado a ser ofensivo.
Ante ello, se prevé que un escenario ideal para la afición será que el encuentro culmine con un marcador cerrado, lo que, en su caso, imprimiría una importancia peculiar al partido de vuelta.
En todo caso, lo importante es considerar que la estrategia y los cálculos son fundamentales, porque, en todo caso, la final no se decide hoy, sino en el partido de vuelta, que en el extremo podría concluir en tiempos extra o tiros penales. Por lo tanto, los directores técnicos deben considerar las condiciones físicas de jugadores clave, así como las tarjetas amarillas que pueden acumular en el partido de ida.