La resaca, también conocida como cruda, es el resultado del excesivo consumo de alcohol, que provoca síntomas como dolor de cabeza, sed, fatiga, debilidad, náuseas y dolor muscular, entre otros malestares. Existen numerosos mitos sobre remedios y alimentos que supuestamente pueden empeorar la situación, como el caso de la sandía, que algunos consideran peligrosa e incluso fatal si se consume durante este estado.
Esta fruta contiene carbohidratos, proteínas, minerales, fibras, agua, carotenoides, cucurbitacinas y ácidos grasos y orgánicos que no tienen efectos nocivos al combinarse con el alcohol. Las semillas de la sandía contienen glucósidos y cianógenos que pueden generar ácido cianhídrico, lo cual podría causar una reacción adversa en el cuerpo. Sin embargo, para que esto ocurra, sería necesario consumir las semillas de 169 sandías, por lo que los mito carecen de fundamento.
A pesar de que se afirma que varios comprimidos y tabletas de venta libre previenen las resacas, la única forma garantizada para prevenir una resaca es evitar el alcohol. Si optas por beber alcohol, hazlo con moderación. El consumo moderado de alcohol para adultos sanos significa hasta una copa por día para las mujeres de todas las edades y para los hombres mayores de 65 años, y hasta dos copas por día para los hombres de 65 años o menores.