El majestuoso volcán Popocatépetl, mejor conocido como Don Goyo, ha vuelto a acaparar la atención de todos al emitir una impresionante fumarola que, sorprendentemente, tomó la forma de un corazón.
Las imágenes fueron capturadas desde las juntas auxiliares de La Sabana, La Agrícola y San Diego Acapulco, ubicadas en el municipio de Atlixco, y pronto se difundieron en redes sociales. Los usuarios no tardaron en compartirlas, haciendo comentarios sobre el volcán “enamorado”.
Este fenómeno ha evocado la famosa leyenda de amor entre los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl. Según el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), la leyenda cuenta que Iztaccíhuatl era una bella princesa que se enamoró de Popocatépetl, un valiente guerrero.
El padre de Iztaccíhuatl, antes de permitir su unión, envió a Popocatépetl a la guerra con la promesa de que podrían casarse si regresaba victorioso. Desafortunadamente, una noticia falsa sobre la supuesta muerte del guerrero llegó a oídos de la princesa, quien, devastada, cayó en un sueño eterno. Al regresar victorioso, Popocatépetl llevó el cuerpo de su amada a la montaña y ambos fueron transformados en volcanes, donde él permanece activo, velando por su amada inactiva, Iztaccíhuatl.
La reciente fumarola en forma de corazón ha sido interpretada por muchos como un romántico gesto del volcán hacia su amada, haciendo que este antiguo mito cobre vida nuevamente.
¿Cómo está el Popocatépetl hoy en vivo?
Sin embargo, este hermoso espectáculo viene con una advertencia. El Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), en colaboración con el Instituto de Geofísica de la UNAM, informó que el volcán ha registrado 45 exhalaciones de vapor, gases volcánicos y ceniza, así como 908 minutos de tremor de baja amplitud en las últimas horas. Al momento de este reporte, el volcán sigue emitiendo gases y ceniza que se dispersan hacia el norte.
El Semáforo de Alerta Volcánica de Popocatépetl se mantiene en Amarillo Fase 2, lo que significa que pueden ocurrir explosiones moderadas, lluvias de ceniza, y la expulsión de fragmentos incandescentes dentro del radio de exclusión de 12 kilómetros. Las autoridades recomiendan a la población estar atenta a los comunicados y respetar las zonas de seguridad.
Aunque la naturaleza nos regaló un momento romántico, Don Goyo sigue recordándonos su fuerza y actividad constante.