El Día de Muertos es una rica tradición que se celebra el 1 y 2 de noviembre, dedicada a honrar la memoria de aquellos que han fallecido. Su origen se encuentra en un sincretismo entre las celebraciones católicas y las diversas costumbres de los pueblos indígenas de México y Centroamérica. Esta fusión cultural ha dado lugar a una celebración única que combina elementos espirituales, rituales y festivos, reflejando el profundo respeto que se tiene por los difuntos y la creencia en la continuidad de la vida más allá de la muerte. Si quieres saber más, no te pierdas esta nota de El Universal Puebla.
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Con el objetivo de honrar la memoria, el alma y el recuerdo de los difuntos, se ha ido estableciendo un día específico para conmemorar a aquellos que han partido de una manera particular o que poseen ciertas características. Esta práctica busca destacar la diversidad de experiencias de vida y muerte, permitiendo que cada grupo de difuntos reciba un reconocimiento especial. A través de estas conmemoraciones, se fomenta un sentido de comunidad y continuidad, ya que se recuerda y celebra la vida de quienes han dejado una huella significativa en quienes los rodearon. Así, cada día de la festividad adquiere un significado profundo y personal, enriqueciendo la tradición del Día de Muertos.
Las festividades del Día de Muertos son una tradición muy arraigada en México, celebradas por millones de personas. Sin embargo, hay fechas que forman parte de esta efeméride y son menos conocidas. A continuación, te compartimos a quién se le celebra en los días 27 y 28 de octubre de 2024, junto con el significado de cada uno:
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Estas fechas son fundamentales dentro del contexto del Día de Muertos, ya que enriquecen el significado de la celebración y subrayan la conexión entre la vida y la muerte en la cultura mexicana. A través de la conmemoración de distintos grupos de difuntos, se fomenta un profundo respeto por la memoria de quienes han partido, al mismo tiempo que se celebra su legado. Esta tradición permite a las familias recordar y compartir anécdotas, manteniendo vivas las historias de sus seres queridos y reforzando los lazos intergeneracionales. Así, el Día de Muertos se convierte en una ocasión para reflexionar sobre la vida, la muerte y el amor que trasciende, creando un espacio de unión y celebración comunitaria.