Un reciente estudio plantea que simplemente reducir el consumo de carne quizás no sea una medida suficiente. Indica que los aficionados a la carne podrían aumentar su riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 consumiendo tan solo dos porciones de carne roja a la semana, según revela la investigación. Si quieres saber más, no te pierdas esta nota de El Universal Puebla.
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Aunque se ha reconocido ampliamente que consumir grandes cantidades de carne roja es perjudicial, un nuevo estudio publicado en The American Journal of Clinical Nutrition (AJCN) revela una asociación aún más estrecha entre el consumo de carne roja, ya sea procesada o no, y el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Esto sugiere que el impacto en la salud podría ser mayor de lo que se había reconocido previamente.
¿Cuáles son las consecuencias de comer carne roja todos los días?
Comer carne roja todos los días puede tener varias consecuencias negativas para la salud:
1. Mayor riesgo de enfermedades cardíacas: La carne roja, especialmente la procesada, está asociada con un mayor riesgo de enfermedades cardíacas debido a su contenido de grasas saturadas y colesterol, que pueden contribuir al aumento del colesterol LDL (colesterol "malo") y la acumulación de placa en las arterias.
2. Aumento del riesgo de cáncer: Consumir carne roja en exceso, especialmente carne procesada, ha sido vinculado con un mayor riesgo de ciertos tipos de cáncer, como el cáncer colorrectal, de páncreas y de próstata.
3. Mayor riesgo de diabetes tipo 2: Estudios han sugerido que el consumo frecuente de carne roja puede aumentar el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 debido a su contenido de grasas saturadas y su efecto sobre la resistencia a la insulina.
4. Problemas digestivos: El consumo excesivo de carne roja puede dificultar la digestión y causar problemas como estreñimiento o incluso aumentar el riesgo de enfermedades digestivas como la enfermedad diverticular.
5. Aumento de peso: La carne roja es rica en calorías y si se consume en exceso, puede contribuir al aumento de peso y a la obesidad, lo que a su vez aumenta el riesgo de diversas enfermedades crónicas.
La producción de carne roja, especialmente la carne de res, tiene un gran impacto en el medio ambiente debido a la emisión de gases de efecto invernadero, la deforestación y el uso intensivo de recursos como el agua y los alimentos para animales.
En resumen, aunque la carne roja puede ser parte de una dieta equilibrada en cantidades moderadas, consumirla en exceso y de manera regular puede aumentar el riesgo de diversas enfermedades y tener un impacto negativo en la salud y en el medio ambiente. Es importante priorizar una variedad de alimentos en la dieta y moderar el consumo de carne roja.
