La historia de los vehículos blindados Sand Cat adquiridos por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) a finales del año 2010 es notable y significativa en enfrentamientos armados. Estos vehículos fueron diseñados por ingenieros israelíes y norteamericanos como una solución ligera y blindada para operaciones en zonas áridas, terrenos difíciles y entornos urbanos. Si quieres saber más sobre estos vehículos militares no te pierdas esta nota de .

El vehículo base de este blindado ligero es el Ford F550, equipado con un motor Turbo Diesel de ocho cilindros y 6.7 litros que transmite potencia a través de una caja de cambios automática de seis velocidades.

Foto: Producción El Universal Puebla
El vehículo base de este blindado ligero es el Ford F550, equipado con un motor Turbo Diesel de ocho cilindros y 6.7 litros que transmite potencia a través de una caja de cambios automática de seis velocidades. Foto: Producción El Universal Puebla

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El propósito de este vehículo es proporcionar a militares y policías especializados la movilidad y capacidad de fuego necesarias para desplegarse de manera independiente, sin depender de refuerzos adicionales para llevar a cabo operaciones contra grupos armados en cualquier tipo de condición. De este modo, los Sand Cat han demostrado ser cruciales en el enfrentamiento contra grupos terroristas y en operaciones de guerra irregular como en Medio Oriente y México.

¿Cómo son los Sand Cat que usa el Ejército Mexicano?

El vehículo base de este blindado ligero es el Ford F550, equipado con un motor Turbo Diesel de ocho cilindros y 6.7 litros que transmite potencia a través de una caja de cambios automática de seis velocidades. La carrocería está protegida por placas de acero balístico y materiales de alta resistencia, asegurando una notable durabilidad incluso en condiciones ambientales severas. El diseño y la producción de las versiones actualizadas del Sand Cat comenzaron en el año 2015.

El Ejército Mexicano adquirió 250 unidades del Sand Cat en 2011 a través de la empresa Oshkosh.

Foto: Producción El Universal Puebla
El Ejército Mexicano adquirió 250 unidades del Sand Cat en 2011 a través de la empresa Oshkosh. Foto: Producción El Universal Puebla

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Algunas variantes en uso por el ejército mexicano están equipadas con una torreta de operación remota en el techo, la cual porta una ametralladora calibre 12,7 mm y un lanzagranadas automático Mk. 19. Este diseño específico se monta sobre un chasis de camión Ford Superduty y es ensamblado por la Secretaría de la Defensa Nacional. El Ejército Mexicano adquirió 250 unidades del Sand Cat en 2011 a través de la empresa Oshkosh. Estos vehículos fueron destinados para fortalecer las operaciones contra el narcotráfico, especialmente en operativos de inserción, donde complementan a los más de 4,200 Humvees en posesión de la Defensa Nacional.

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