En los primeros meses del año se ha registrado un incremento de casos de COVID-19 en México, generando inquietud debido a la alta ocupación hospitalaria que ha alcanzado niveles del 70% al 100% en ciertos centros médicos. Este aumento marca la primera alza significativa desde que la Organización Mundial de la Salud (OMS) retiró la designación de emergencia sanitaria al virus.
Una de las primeras medidas tomadas fueron que de la Secretaría de Educación Pública, que emitió un comunicado pidiendo la reintegración del uso de cubrebocas, dada esta situación y con el objetivo de prevenir la propagación del virus. Además, la institución educativa ha instado a reforzar otras medidas de seguridad e higiene, como mantener la sana distancia y no asistir a la escuela en caso de presentar síntomas relacionados con esta enfermedad.
Si bien por el momento no es algo para preocuparse o asustarse, es importante saber qué diferencia existe entre los síntomas por COVID-19, gripe y un resfriado. Esta pregunta recurrente se la hacen muchos padres, pero también va de la mano con aquellos adultos mayores que puedan pasarla realmente mal si no logran medicarse a tiempo o no cuenta con las vacunas necesarias para prevenirlo. Toma nota.
- Los síntomas de COVID pueden incluir fiebre, tos, fatiga, dolores musculares o corporales, congestión, dificultad para respirar, dolor de garganta, dolor de cabeza, estornudos, vómitos/diarrea o pérdida del gusto/olfato. Los síntomas aparecen entre el segundo y 14° día después de la infección.
- Los síntomas de la gripe pueden incluir fiebre, escalofríos, dolor de cabeza, dolores corporales, tos seca, fatiga, congestión nasal y dolor de garganta. Algunos niños pueden vomitar y tener diarrea. Los síntomas aparecen aproximadamente entre el primer y cuarto día después de haber estado expuesto a una persona enferma.
- Los síntomas del resfriado pueden incluir fiebre, tos, fatiga, congestión nasal, dolor de garganta, estornudos y glándulas ligeramente inflamadas. Los resfriados son infecciones de las vías respiratorias superiores que pueden ser causadas por muchos virus.
Algo muy importante es que, a comparación de años anteriores, se pueden obtener vacunas de manera privada, ofreciendo una capa adicional de protección para aquellos que así lo deseen. La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios autorizó la venta de vacunas por parte de particulares, facilitando la disponibilidad de dosis de reconocidas como Moderna y Pfizer.
