La Ciudad de México, conocida también como la Capital Cultural de América, es uno de los centros urbanos más importantes de Latinoamérica. Sin embargo, para un poblano, la experiencia de visitar o mudarse a esta metrópolis puede ser emocionante, pero, a veces, muy abrumadora.
Es por eso que hemos decidido enumerar cinco cosas que le pasan a un poblano cada vez que viaja a la Ciudad de México.
El choque cultural
Como lo mencionamos con anterioridad, la CDMX es una de las ciudades más grandes, incluso más que Puebla, y el ritmo de vida de los chilangos (como coloquialmente se les dice a los habitantes de la Ciudad de México) es muy acelerado, eso tomando en cuenta el caos del tráfico y el ruido de la ciudad que es el doble de lo que vivimos estando aquí.
La gastronomía chilanga
Puebla es famosa por su gastronomía, la cual es considerada patrimonio de la humanidad, sin embargo, los poblanos tenemos un verdadero conflicto con la amplia gama de platillos y nuevas invenciones que solo existen en la Ciudad de México.
¿Quesadillas sin queso?, ¿chile en nogada sin capear?, ¿gorditas rellenas de sudadero o tripa?, ¿cemitas en pan de torta? Este, no gracias.
Moverse en el metro y en transporte público
Algo va a delatar siempre a un poblano, es su gran temor al metro. Este medio de transporte es de los más extensos y efectivos de la Ciudad de México, pero también puede ser un laberinto bastante confuso.
Los poblanos pueden sentirse desorientados mientras se familiarizan con las líneas y estaciones del metro.
Y lo mismo pasa cuando deciden subirse a un “pesero” o al famoso Metrobús, las calles son muy grandes, además a diferencia de Puebla, que tenemos colores y números para todas las rutas, en la CDMX, todos son del mismo color y no hay nada que los identifique.
Eso sí, un poblano, siempre desconfiará de los taxistas, pues aunque tengan taxímetros, siempre marcan precios diferentes.
Seguridad
Al ser una ciudad bastante grande, hay áreas que requieren cierta precaución. Así que como buen poblano debes aprender adaptarte a las medidas de seguridad que se viven allá, como por ejemplo estar alerta a la alarma sísmica, pero sobre todo aprender todo acerca de las zonas más seguras e inseguras de la CDMX.
Además, ten en cuenta que perderse en la Ciudad de México puede ser bastante fácil, ya que en comparación de Puebla, que está trazada casi perfectamente con una numeración ordenada, las calles de la ciudad tienen varios nombres e incluso algunos hasta se repiten.
Sorprenderse por los grandes edificios y monumentos
¿Sabes cómo los chilangos detectan fácilmente a las personas que no son de la ciudad? Pues todos sus visitantes ven hacia arriba, ¿la razón?, los miles de edificios y monumentos que se encuentran en la ciudad.
Hay una frase popular entre los chilangos y que dice que, si ves a alguien siempre viendo hacia arriba, es de provincia. Así que aguas, si no quieres que te cachen como un poblano en la ciudad, aparenta que no te impresionan sus grandes construcciones.