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Beatificarán al sacerdote poblano Moisés Lira Serafín en la Basílica de Guadalupe

La ceremonia estará presidida por el representante papal, el cardenal Marcello Semeraro

Beatificación del sacerdote poblano Moisés Lira Serafin, en la Basílica de Guadalupe / Foto EsImagen, Redes Sociales
14/09/2024 |10:53
Alejandro Villegas
RedactorVer perfil

El sacerdote poblano Moisés Lira Serafín será beatificado hoy, sábado 14 de septiembre, en una ceremonia encabezada por el prefecto del dicasterio de las causas de los santos y representante del Papa Francisco, el cardenal Marcello Semeraro, en la Basílica de Guadalupe.

El sacerdote Moisés Lira Serafín nació en Zacatlán, Puebla. Sin embargo, fue en Guanajuato donde ocurrió el milagro atribuido a su intervención, lo que llevó a su beatificación.

La ceremonia congregará a representantes eclesiásticos de varios países, como Kenia, Guatemala y Perú, así como del Vaticano.

La ceremonia de beatificación, que se llevará a cabo al mediodía, se transmitirá por diversos medios digitales, incluyendo el portal www.virgendeguadalupe.org.mx, así como en YouTube, Facebook, X, Instagram, Spotify, TikTok y Threads.

El milagro del sacerdote Moisés Lira Serafín

El Papa Francisco aprobó el 14 de diciembre de 2023 la beatificación del sacerdote Moisés Lira Serafín, misionero del Espíritu Santo y fundador de la Congregación de las Misioneras de la Caridad de María Inmaculada.

El milagro atribuido a su intercesión es la curación de una bebé en el vientre de su madre.

El postulador de la causa de beatificación, el sacerdote David Padrón, misionero del Espíritu Santo, explicó que el milagro tuvo lugar en 2004 en el estado de Guanajuato.

La bebé en gestación fue diagnosticada con hidropesía fetal no inmune en la semana 18 de gestación. La madre se encomendó a la intercesión del padre Lira Serafín.

En la semana 26 de gestación, tras una nueva valoración médica, se descubrió que la bebé estaba sana. La bebé nació bien y ha crecido con normalidad.

La beatificación es ampliamente celebrada por los Misioneros del Espíritu Santo, quienes ven en la figura del próximo beato un ejemplo a seguir.