El 1 de diciembre ha sido históricamente una fecha simbólica en México, no solo por marcar el inicio del último mes del año, con las festividades navideñas, reuniones y otros eventos sociales, sino también porque en los años de elección presidencial, era la fecha de la Transmisión de Poderes, es decir, cuando el nuevo presidente asumía oficialmente el cargo. Sin embargo, esta fecha también ha tenido una relevancia significativa en el ámbito laboral. Si quieres saber más, no te pierdas esta nota de El Universal Puebla.
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Recientemente, una modificación a la Ley Federal del Trabajo afectó directamente a los empleados, ya que el 1 de diciembre dejó de ser considerado como un día festivo obligatorio. Este cambio impacta a los trabajadores que, en años anteriores, podían contar con el día libre para conmemorar la transición de gobierno. Ahora, aunque la fecha sigue siendo importante en términos políticos, no se reconoce como un feriado oficial para los empleados, a menos que se disponga de otro tipo de acuerdo o condición en su lugar de trabajo. Este ajuste puede significar que, dependiendo del tipo de empleo o sector en el que se trabaje, el 1 de diciembre puede ser un día laboral regular, y no un día de descanso obligatorio como se había dado en el pasado.
El 1 de diciembre de 2024 cae en domingo, lo que implica que todos los empleados que trabajen ese día tienen derecho, por ley, a recibir la Prima Dominical. Esta compensación es un pago adicional que corresponde a los trabajadores que laboran durante los domingos, y está regulada por la Ley Federal del Trabajo.
De acuerdo con esta ley, los empleados que trabajen en domingo tienen derecho a recibir una compensación económica equivalente al 25% adicional de su salario diario habitual. Es decir, si un trabajador recibe una cierta cantidad por un día de trabajo ordinario, el domingo se le debe pagar un 25% más de esa cantidad, como una forma de reconocimiento por trabajar en un día que generalmente se considera de descanso. Este derecho es una medida que busca equilibrar las cargas laborales de los empleados y asegurarles una compensación justa por su esfuerzo en un día no laborable por excelencia, como lo es el domingo.
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A partir de 2024, con la modificación a las leyes mexicanas, el 1 de diciembre ya no será considerado un día festivo oficial en el país, ya que la Transmisión de Poderes se trasladó al 1 de octubre. Esto significa que el 1 de diciembre será un día común y corriente, y no habrá un reconocimiento especial como día festivo en los sexenios subsecuentes. Una de las principales implicaciones de este cambio es que los empleadores ya no están obligados a pagar el “pago doble” a los trabajadores que laboren el 1 de diciembre, que anteriormente consistía en un pago extra, equivalente a su salario diario más un bono adicional por el mismo monto (un total de tres días de salario). Este beneficio solo aplicaba en días festivos oficiales, y con la eliminación del 1 de diciembre como feriado, los trabajadores que deban trabajar ese día recibirán su salario habitual, sin la compensación extra.