El Valle de Tehuacán-Cuicatlán es la zona árida o semiárida con mayor diversidad biológica de todo América del Norte.
Este gran desierto esconde una gran variedad de tesoros naturales como lo son sus impresionantes bosques de cactáceas, cerros y por su puesto, manantiales.
Uno de estos manantiales es “La Taza de Chilac" ubicado al costado sur-occidental del Valle de Tehuacán, en el municipio de San Gabriel Chilac.
Este manantial ha cobrado popularidad por ser un espacio de esparcimiento, debido a que no hay intervención humana en estos surcos por los que pasa el flujo constante de agua cristalina.
Asimismo, el ojo de agua, como lo llaman los lugareños, es considerado como un atractivo turístico de la zona, pues los turistas acuden especialmente en Semana Santa para conocerlo y de paso refrescarse en sus aguas.
Este lugar se encuentra entre los límites del municipio de San Gabriel Chilac, San Francisco Altepexi, así como la junta auxiliar de San Pablo Tepetzingo, por lo que alimenta a ambas poblaciones.
San Gabriel Chilac se encuentra en la región de la Mixteca Poblana, su nombre viene del náhuatl y significa “Donde abundan los caracolitos”, ya que existen varios caracoles petrificados.
Se dice que esta población fue fundada por Popolacas, y se cree que su nombre es el apócope del apellido de la mujer que gobernó al pueblo: Ana Chilacatla Momotla, casada con Toltecatl, en el siglo XVI.
Además de su manantial, Chilac cuenta con otros atractivos turísticos como lo son:
Por último, cabe destacar que San Gabriel Chilac es considerado como la cuna del bordado a mano y es que la mayoría de sus habitantes se dedican a la confección de ropa típica, desde los más pequeños hasta los adultos mayores.
Las prendas típicas que se elaboran en Chilac son vestidos, huipiles, camisas y blusas, bordadas a mano.
San Gabriel Chilac se encuentra a dos horas de la capital poblana.