Uno de los principales atractivos turísticos de Puebla son los túneles que conectan la ciudad con Los Fuertes de Loreto y Guadalupe e incluso se cree que existen más que abarcarían toda la ciudad. Es por ello que en esta ocasión vamos a enumerar 3 razones que los hacen especiales.
Su antigüedad.
El Pasaje Histórico 5 de Mayo es un túnel con una distancia de 477 metros y se considera que podría datar de la segunda mitad del siglo XVII, ya que tiene una antigüedad aproximada de tres siglos y medio, así lo señala la Gerencia del Centro Histórico y Patrimonio Cultural del Ayuntamiento de Puebla que, en su página web, asegura que existen indicios de que este sea tan solo un tramo de lo que podría ser una red subterránea de entre 10 y 12 kilómetros.
De acuerdo con la “Guía 4 Épocas, 85 Lugares para conocer Puebla”, estos túneles fueron descubiertos en 2011 y 2012, cuando comenzó la construcción del Viaducto Zaragoza y algunas personas que se encontraban ahí, entre ellos arqueólogos, encontraron lo que sería un muro de contención del antiguo río San Francisco, y sobre ese muro una especie de arco tapiado que al ser explorado resultó ser la entrada de una galería subterránea que se dirige hacia el barrio de Xanenetla.
Fue hasta el 20 de febrero del 2016, que fue abierto al público y ha sido considerado como uno de los atractivos turísticos más importantes de la ciudad de Puebla.
Su leyenda
Hay varias leyendas que giran en su entorno, unas aseguran que estos túneles, fueron construidos durante la época colonial y fueron utilizados para transportar a los nobles españoles y a sus tesoros de un lugar a otro sin ser detectados.
Pero la más popular asegura que esta estructura se usó como estrategia militar para que el ejército mexicano, comandado por el general Ignacio Zaragoza, venciera en la Batalla del 5 de mayo.
Su atractivo
En la actualidad, estos túneles cuentan con iluminación y recursos audiovisuales, que permiten a los turistas conocer más de su historia.
En su interior podrás apreciar algunos objetos que se encontraron durante su restauración, entre los que destacan ballestas y balas, elementos que confirman la leyenda de que fueron usados como caminos subterráneos de soldados.
El acceso al recorrido denominado los Secretos de Puebla se realiza a través del Puente de Bubas, donde alguna vez hubo un hospital que curaba a gente con enfermedades traídas por franceses, en el cual se construyó un puente para tener comunicación con la ciudad.
