Timoteo, el personaje sin rostro, del artista plástico Rodrigo de la Sierra, se ha vuelto un emblema del Centro Cultural Universitario (CCU) de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP).
Con el paso del tiempo se ha convertido en un elemento obligado de referencia al visitar el recinto universitario.
Un punto muy instagrameable, ya que la fotografía es obligada, para tener un recuerdo del momento.
Sin duda, un personaje en torno al cual los universitarios, al igual que los visitantes asiduos al CCU, han tejido infinidad de historias y con el que guardan una relación cercana.
Aunque Timoteo, llegó no hace mucho -en 2015- al CCU como parte de la exposición “Punto de Reflexión”, se ha convertido en parte de su acervo permanente.
Timoteo no tiene rostro, por lo que puede ser cualquiera, quien está sentado en un plano reflexivo.
Aunque con el paso del tiempo Timoteo ha cambiado de posición en el CCU no ha dejado de estar en sus instalaciones.
Su creador, Rodrigo de la Sierra, expresó en 2021 Timoteo es como un reflejo de cada uno de nosotros, una especie de alter ego.
“Timo es el marco de una puerta donde el espectador se detiene y todo lo que está en el interior es su propia historia”.
Pese a su imagen bonachona y juguetona, Timoteo es profundamente introspectivo. Es el ser humano en búsqueda constante. Como todos, se enfrenta a la duda, al miedo, al sinsentido, al fracaso, al egoísmo, al tedio, a la nostalgia y al amor, pero sin perder el optimismo y “sin tomarse demasiado en serio”.
Por todo ello, Timoteo es un personaje más que instagrameable que se ha convertido en parte de la comunidad del CCU.