Las manchas de café son una de las más comunes que nos enfrentamos día con día. Lo peor es cuando estos incidentes ocurren en el trabajo o fuera de casa.
No obstante, a pesar de que las manchas de café pueden ser difíciles de eliminar, especialmente cuando se trata de ropa blanca, no caigas en pánico, pues existen métodos caseros que pueden ayudarnos a eliminar esas manchas no deseadas.
¿Cómo quitar manchas de café en la ropa?
Actúa rápidamente
Tan pronto como derrames café sobre una superficie, trata de absorber la mayor cantidad posible con un paño limpio o una toalla de papel. La rapidez en la acción puede prevenir que la mancha se fije.
Vinagre blanco
Este es uno de los remedios caseros más eficaces, que además siempre vas a encontrar en casa.
Lo primero que debes de hacer es aplicarlo directamente sobre la mancha y dejarlo reposar de 10 a 15 minutos antes de meter a lavar la prenda.
Bicarbonato de sodio
Otra opción es hacer una pasta con bicarbonato de sodio y agua, y aplicarla sobre la mancha. Déjalo reposar un par de horas para después lavar la prenda con agua fría.
El bicarbonato es un blanqueante perfecto para eliminar manchas de café.
Agua oxigenada
Así como es ideal para limpiar y desinfectar la piel, el agua oxigenada también es de gran ayuda para quitar las manchas.
Aplícalo sobre la mancha con un trapo o paño limpio y espera que actúe durante 10 minutos después, lava la prenda en la lavadora.
Agua mineral
Si este incidente ocurrió mientras estabas fuera de casa, y la mancha aún está húmeda, te recomendamos pedir un agua mineral y vierte un poco de ella sobre la mancha, hasta que el color oscuro desaparezca.
Una vez que llegues a casa y la metas a la lavadora, la prenda recuperara su diseño original.
Limón y sal
Tal vez esta combinación te pueda resultar fuera de lo común; sin embargo, este truco es muy útil, sobre todo, para limpiar una mancha de café.
Exprime un limón grande y añade una cucharada de sal. Mezcla los ingredientes de manera uniforme y luego aplícalos sobre la mancha.
Utiliza un cepillo o esponja para frotar suavemente con movimientos circulares. Deja reposar durante unos minutos y luego lava la prenda como de costumbre.
