Tlaxcala cuenta con solo tres Pueblos Mágicos (Huamantla, Ixtenco y Tlaxco), los cuales ofrecen a los visitantes una amplia gama de atractivos. Son lugares cargados de historia y belleza natural esperando ser explorados.
Huamantla
Ubicada cerca del volcán Malinche, Huamantla es conocida por su devoción a la Virgen de la Caridad, cuya festividad en agosto incluye la elaboración de elaborados tapetes de aserrín, reconocidos incluso a nivel internacional como “La noche que nadie duerme”.
Además de su tradición taurina y pulquera, la ciudad alberga el templo y Ex Convento de San Luis Obispo, y ofrece la posibilidad de realizar vuelos en globo aerostático.
Tlaxco
Rodeada de montañas boscosas, llanuras de magueyes y una gran laguna, Tlaxco es una comunidad de raíces otomíes, famosa por su producción de pulque, quesos y artesanías en madera.
En su territorio se encuentran varias haciendas históricas, como Tepetzala, Xochuca, Xalostoc y San Buenaventura, que deleitarán a los visitantes. En el ámbito religioso, destaca la parroquia de San Agustín.
Ixtenco
El Pueblo Mágico más reciente de Tlaxcala, declarado como tal en 2023, es conocido por su Feria del Maíz, sus cráteres, su gastronomía y sus artesanías. Ixtenco es considerado el último bastión de la cultura otomí en el estado.
Los visitantes pueden explorar antiguas haciendas y descubrir paisajes naturales impresionantes. Cada 23 de junio, el pueblo celebra a su santo patrón, San Juan Bautista, en la conocida “Fiesta del Maíz”.
Una experiencia imprescindible es ascender al cerro de Xalapasco, también conocido como “El señor de los 10 cráteres”, desde donde se pueden observar diferentes cráteres formados por la actividad volcánica en la región hace miles de años.
