A una distancia de dos horas de la ciudad de Puebla se localiza el municipio de Chignautla, un lugar lleno de belleza que regala la naturaleza, propio de la Sierra Norte.
Su nombre proviene del náhuatl: chicnahui, atl y tlan; que significa nueve, agua y lugar; lo que se traduce como “Lugar de los nueve ríos” o de los “nueve manantiales”.
Al llegar al centro del municipio te encontrarás con la actividad comercial que diariamente viven sus habitantes, el movimiento que generan las escuelas y muy escasamente la presencia de turistas en temporada baja.
En el centro, además de acudir al mercado municipal, uno de los primeros sitios que se recomienda visitar es la parroquia de San Mateo Apóstol, que se ubica en la calle Benito Juárez número 73950, Oriente 409, de la Sección Tercera.
Se trata de una estructura religiosa de origen colonial que data del siglo XVI, cuyo interior resguarda retablos tallados a mano por los indígenas.
En la fachada se pueden apreciar detalles exteriores como arcos, capiteles, puertas y ventanas, cuya materia prima fue la cantera, de la que Chignautla posee diversas minas.
Este municipio posee una belleza natural que atrae a todo visitante que gusta de la eco-aventura, por lo que se recomienda conocer las cuentas El Encanto, las cuales son considerados por las personas como lugares sagrados y especialmente por los médicos tradicionales.
En tu visita podrás darte cuenta de cruces de maderas, de diferentes tamaños y colores, que se cree colocan los curanderos de la localidad, tal como lo hacían en tiempos que inició la evangelización, pues tuvieron que recurrir a las cuevas para conservar las creencias y ritos prehispánicos.
Para obligada de todos visitantes es este cerro, uno de los puntos más emblemáticos de la localidad, desde donde podrás disfrutar de una vista panorámica espectacular, no solo del pueblo de Chignautla, sino también de Teziutlán y del Cofre de Perote.
En este sitio se practican diversas actividades como observación del paisaje y la naturaleza, senderismo, campismo, ciclismo de montaña, fotografía, excursionismo, entre otros.
En la cima del cerro se ubica un monumento dedicado a Cristo Rey, donde los visitantes católicos tienen como meta conocerlo. Para ello ofrecen la caminata que realizan por un sendero que de lado a lado solo hay vegetación, y si haces el ascenso muy temprano o muy tarde seguramente serás acariciado por la neblina propia de la zona.
Desde luego, a unos metros del cerro, te encontrarás con el centro recreativo Los Manantiales, donde las cascadas y manantiales que posee el municipio serrano se reavivan durante la temporada de lluvia.
Nadar, refrescarte o solo mojarte los pies, podrás hacerlo en este lugar donde las familias y amigos sí o sí visitan por primera vez o regresan cada oportunidad que pueden, ya que es un regalo de la naturaleza y no tiene costo alguno.
Puedes practicar remo y natación en sus frías aguas de manantial, así como pasar un rico día de campo.
Son un fenómeno geológico único en la zona. Se trata de una formación rocosa que parece estar en llamas debido al gas que emana de su interior. Es un espectáculo impresionante que no te puedes perder durante tu visita.
Por muchos es conocido que la comida de la Sierra de Puebla es de verdad “un manjar de Dioses”, por la variedad de platillos típicos como los tlayoyos, tamales, tacos dorados y de guisado y el chilposo, que es un caldo picosito con carne y verduras.
En cuanto a bebidas, sin duda está el famoso Yolixpa de la región, que es un licor a base de 14 hierbas maceradas en aguardiente, así como los vinitos de frutas fermentadas y el Xole, el cual se prepara solo en ocasiones especiales y en su fiesta que se realiza cada septiembre.
De Puebla o México debes conducir o tomar un autobús público que te lleve a Teziutlán, existen corridas por parte de líneas como VIA y ADO.
Al llegar a Teziutlán podrás abordar taxis colectivos o particulares, así como transporte público que te conduce a Chignautla que está a una distancia de 15 minutos desde Teziutlán.