Veracruz, con su litoral, posee playas de ensueño que esperan convertirse en las favoritas de los vacacionistas.
Una de ellas es la playa Lechuguillas, ubicada en el municipio de Vega de Alatorre, en la región norte de Veracruz.
Quienes la visitan, lo primero que aprecian al ingresar es una escultura en forma de cazuela de mariscos, un elemento grande y peculiar de la gastronomía local que ha dado fama a la playa Lechuguillas.
De hecho, los habitantes presumen abiertamente que en Lechuguillas se prepara la cazuela de mariscos más rica del planeta, por lo que para quienes la visitan es casi una obligación probarla y constatar su calidad.
En la base de la emblemática escultura se puede leer: “La cazuela de mariscos más sabrosa del mundo”.
Vega de Alatorre obtuvo en 2013 el récord Guinness por preparar la cazuela de mariscos más grande del mundo.
Asimismo, en el Museo de Sitio Las Higueras se pueden apreciar pinturas rupestres. Gracias a las tareas de conservación realizadas a lo largo de los años, fue catalogada como Área Natural Protegida (ANP), con la denominación de santuario.
Para llegar a la zona norte del Santuario Playa Lechuguillas, es posible transitar por la carretera federal Costera del Golfo 180, Veracruz-Nautla, frente a la comunidad de Vega de Alatorre, y seguir las indicaciones.
El Santuario Playa Lechuguillas
En diciembre de 2023 se emitió el decreto que la declara Área Natural Protegida (ANP), con la denominación de santuario. El área cuenta con una superficie de 147 hectáreas.
La declaratoria surgió porque en la playa Lechuguillas se habían registrado problemáticas que amenazaban la conservación de las tortugas marinas y su hábitat de anidación. Entre ellas, el tránsito de vehículos y el paso del ganado, que conllevan la compactación de la arena, lo cual dificulta la eclosión de las crías y puede ocasionar malformaciones o la pérdida del nido.
Además, se destacó el riesgo de que las tortugas sean arrolladas por vehículos, el saqueo de nidadas o la matanza de hembras anidadoras de tortugas marinas para consumo humano, así como el constante acarreo de desechos sólidos que el mar arroja a la playa.
