Faltan pocos días para una de las celebraciones más importantes de México, el Día de Muertos. En Puebla, son varios los lugares donde estos días se viven con gran fervor, como con las ofrendas de Huaquechula, monumentales altares dedicados a los muertos.
Huaquechula es un municipio que se localiza en el valle de Atlixco y muy cerca a la entrada de la región Mixteca. Se encuentra a unos 60 minutos de la ciudad de Puebla.
Su nombre proviene del náhuatl y significa “junto a las hermosas y ricas plumas del águila”. Eso te da una idea que al llegar a esta localidad te sorprenderá sus paisajes montañosos y su vegetación.
¿Cuándo se pueden visitar las ofrendas en Huaquechula 2024?
Para el presente año, de acuerdo con René Hernández Martínez, director de Comunicación Social del municipio de Huaquechula, este año se levantará un total de 28 altares monumentales, los cuales corresponden al número de personas que fallecieron en el año.
A partir del día 28 de octubre se podrán visitar cuatro ofrendas que estarán dedicadas a las personas que murieron a causa de un accidente.
El 31 de octubre se colocará un altar en memoria de un niño que pereció.
Los días 1 y 2 de noviembre los visitantes podrán conocer las 23 ofrendas restantes.
Las ofrendas dedicadas a las personas que ya murieron son edificadas por sus familiares, quienes llegan a invertir desde 10 mil hasta 100 mil pesos, muchas veces con las remesas que envían sus familias desde Estados Unidos.
¿Qué llevan las ofrendas de Huaquechula?
Estas ofrendas son admiradas por la forma en que se construyen, para lo cual los deudos comienzan a tener todo listo tras el deceso de su ser querido.
En una habitación de la vivienda se retira todo mueble para colocar el altar, el cual es de tres niveles y su estructura es de madera y decorada con varios metros de tela raso o seda, principalmente blanca.
El primer nivel representa el mundo terrenal y lo que le gustaba al difunto, por lo que ahí se coloca sus bebidas y comida favorita, alguna prenda que usó, su perfume o loción a alguna herramienta de trabajo.
En el segundo incluye todos los santos o ángeles de la persona fallecida con el fin de que le ayuden a escalar el último peldaño. Se acompaña con mucha luz, con un espejo para que se refleje la imagen del ser querido y se acompaña con llorones, que son figuras de ángeles secándose las lágrimas.
En el tercero simboliza el cielo, adonde debe llegar la persona finalizada. En este espacio la familia suele colocar la imagen o bulto de Jesús, de la Virgen de Guadalupe o de la advocación de la cual son creyentes.
Por estos simbolismos y por su tamaño monumental, los altares de Huaquechula fueron declarados Patrimonio Cultural del Estado en 1997.
Para este año se espera la llegada de más de 50 mil personas y una derrama económica de 500 mil pesos.
Una de estas ofrendas de Huaquechula será colocada en Brooklyn, Nueva York, para que los connacionales vivan esta experiencia única, que también será admirada por turistas de diversas partes del mundo.