Con casi cinco décadas en los medios de comunicación, José Ramón Fernández es ampliamente conocido por ser un férreo crítico de los deportes, pero pocos son quienes le recuerdan en su faceta de futbolista.
Durante muchos años fue el comentarista estrella de las televisoras Imevisión y TV Azteca, y actualmente desarrolla su profesión como comentarista de ESPN.
José Ramón Fernández, hijo de españoles, lleva el futbol en la sangre siendo gran fanático del Real Madrid, aunque tampoco esconde su cariño por los Pumas de la UNAM.
La familia de José Ramón radicó en Puebla y ahí participó durante su juventud en las ligas de futbol amateur en equipos como el Llanes o el Deportivo Español.
Se dice que el periodista jugaba de lateral, debido a su corta estatura, nunca se animó a jugar al ataque, así que se convirtió en un férreo defensa por la banda, muy veloz, muy entrón, pero de poca técnica.
En sus mejores momentos quiso entrar a jugar al Puebla de manera profesional, pero vio que sus aptitudes no le alcanzaban para tanto, así que decidió escoger el camino de los libros y después el del periodismo.
José Ramón Fernández es licenciado en Administración de Empresas y en literatura española, materia en la que fue docente.
Joserrá en Qatar
José Ramón Fernández y David Faitelson volverán a trabajar con Christian Martinoli y Luis García, en esta ocasión durante la Copa del Mundo de Qatar 2022.
Los cuatro comentaristas deportivos compartieron detalles de este proyecto mundialista.
Faitelson escribió “Vuelven ‘Los Titanes’” haciendo referencia que sucederá lo mismo que el Mundial de Rusia 2018, donde los analistas debatían sobre lo sucedido en la jornada de los partidos y era patrocinado por una empresa de telefonía.
El programa será transmitido por las dos televisoras donde trabajan, es decir TV Azteca y ESPN.
El propio comentarista de ESPN compartió el video donde se observa a José Ramón, Martinoli y el doctor García en una mesa narrando alguna jugada y Faitelson cierra diciendo “México, Campeón del Mundo”, mientras el resto de la mesa comienza a reírse.
