Cuando las temperaturas bajan y el invierno se apodera del paisaje, México ofrece destinos que te invitan a disfrutar del frío de una manera única. Desde volcanes cubiertos de neblina hasta calles empedradas llenas de historia, estos Pueblos Mágicos son perfectos para quienes buscan una experiencia invernal inolvidable.
Ubicado entre Veracruz y Puebla, Orizaba es un Pueblo Mágico que cautiva con su cercanía al imponente volcán Pico de Orizaba, el punto más alto de México con 5 mil 636 metros sobre el nivel del mar.
Este volcán, también conocido como Citlaltépetl, ofrece un parque nacional ideal para actividades ecoturísticas y es un destino soñado para montañistas experimentados. Durante el invierno, sus cumbres se cubren de nieve, creando un paisaje espectacular. La región también cuenta con barrancas, grutas y caídas de agua que enriquecen su oferta natural.
San Cristóbal de las Casas es un Pueblo Mágico que combina un clima templado con una ubicación estratégica. Este destino es famoso por sus bajas temperaturas en invierno, que acentúan su encanto montañoso y colonial.
Entre sus atractivos están la catedral de San Cristóbal Mártir y el Museo del Ámbar. Cerca de la ciudad, puedes explorar las Grutas de Rancho Nuevo, Zinacantán y San Juan Chamula.
Ubicado en los estados de Puebla, Morelos y Estado de México, este parque es hogar de los emblemáticos volcanes Iztaccíhuatl y Popocatépetl.
Durante el invierno, sus cumbres suelen estar cubiertas de nieve, creando un escenario perfecto para los amantes del montañismo y los paisajes invernales. Es un sitio ideal para quienes buscan aventuras en un clima frío y desafiante.
Es un lugar perfecto para explorar en invierno a bordo del tren Chepe Express, que atraviesa la impresionante Sierra Tarahumara, también conocida como Las Barrancas del Cobre.
En esta majestuosa región, Creel se presenta como un paraíso para los amantes de la naturaleza y la aventura. Sus hermosos paisajes montañosos y sus casas de madera brindan un ambiente acogedor, ideal para una visita invernal.
Conocido como “la Suiza de México” por sus montañas nevadas y su ambiente alpino, Arteaga es perfecto para quienes buscan disfrutar de deportes invernales.
La Sierra de Arteaga alberga pistas de esquí y paisajes que parecen sacados de un cuento de hadas. También puedes disfrutar de cabañas rodeadas de bosques.
Famoso por sus manzanas y relojes monumentales, Zacatlán también es un destino ideal para los amantes del frío.
Sus nieblas matutinas y su clima fresco durante todo el año crean una atmósfera que combina lo romántico con lo místico. Asegúrate de probar su sidra artesanal y recorrer el mirador de cristal.
Hidalgo es otro destino turístico ideal para visitar en invierno. Durante esta temporada, se convierte en un lugar concurrido pero acogedor. En este pintoresco pueblo puedes recorrer sus calles empedradas, disfrutar de un vino caliente para contrarrestar el frío, y saborear una quesadilla gigante de quelites.
Si eres más aventurero, Mineral del Chico también ofrece la oportunidad de practicar deportes extremos, lanzándote a la aventura en sus alrededores llenos de montañas y naturaleza.
Este Pueblo Mágico es un hermoso destino que se caracteriza por su tranquilidad y magia. Entre sus principales atractivos se encuentran la arquitectura de sus edificaciones, como la Iglesia de los Jarritos, dedicada a Nuestra Señora de Guadalupe, que destaca por su belleza.
Además, la exquisita gastronomía local ofrece platillos tradicionales como la cecina ahumada y antojitos como los tamales de frijol, que se acompañan a la perfección con un delicioso café.
Si eres amante de esta bebida, no puedes perderte la Ruta del Café, que te llevará a conocer todo sobre el proceso de su producción.