Entre los límites de los Pueblos Mágicos de Zacatlán y Chignahuapan, en el hermoso estado de Puebla, se encuentra una de las cascadas más misteriosas y fascinantes de la región. Este atractivo natural tiene un secreto que cautivará a quienes la visiten antes de que termine el 2024.
El Salto de Quetzalapan tiene una impresionante caída de agua de casi 100 metros -alimentada por el río que proviene de la Laguna de Chignahuapan-, y está rodeada de exuberante vegetación.
Para llegar a la base de esta impresionante cascada, es necesario descender 365 escalones de piedra, un detalle que según la leyenda local representa los días del año.
Sin embargo, los habitantes de la zona aseguran que los duendes a veces quitan o agregan escalones, añadiendo un toque de misticismo a la experiencia.
Al llegar, te encontrarás con una poza de aguas termales donde el agua impacta con fuerza, creando un espectáculo natural sin igual.
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En la parte superior de la cascada, hay un centro turístico que ofrece diversas actividades de aventura y deporte extremo, como una tirolesa, un puente colgante, y un cable de alta tensión que invita a caminar a cuatro metros de altura sobre el río, activando tu adrenalina.
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Además, este lugar cuenta con miradores, una cafetería, área de palapas, asadores, sanitarios y estacionamiento, lo que lo convierte en un destino ideal para disfrutar con familia o amigos.
Otro atractivo destacado son los vestigios de la planta hidroeléctrica que se inauguró en 1930, una muestra del ingenio y la historia de la región.
Las personas que la visitan aseguran que su energía ayuda a cerrar ciclos, dejar atrás lo negativo y comenzar el nuevo año con renovadas fuerzas y esperanza. Por eso, cada vez más viajeros se aventuran a este rincón natural para conectarse consigo mismos y con la naturaleza, buscando un momento de reflexión y renovación.
¿Cuánto cuesta y cómo llegar al Salto de Quetzalapan?
La entrada general tiene un costo de $50 pesos. Para los grupos familiares, existe la posibilidad de reservar áreas con asadores para disfrutar de un picnic al aire libre.
Para llegar a este enclave natural, se debe tomar la Carretera 119 dirección Zacatlán y seguir por un camino de terracería señalizado que conduce directamente al la zona.
Si estás buscando una experiencia única para despedir el año, el Salto de Quetzalapan es una opción que no puedes dejar pasar.