La ciudad de Puebla alberga el primer museo dedicado a la vida religiosa femenina en México. Se trata del Museo de Arte Religioso de Santa Mónica, ubicado en la calle 18 Poniente número 103, en el Centro Histórico.
Aunque es de gran interés, es poco visitado en realidad, ofreciendo la oportunidad de conocer la forma de vida de las religiosas de antaño y apreciar sus espacios y arquitectura.
En 1934, tras la exclaustración definitiva de las monjas agustinas recoletas del Convento de Santa Mónica de Puebla, en aplicación de las Leyes de Reforma incorporadas a las Constituciones de 1857 y 1917, el edificio se convirtió en el Museo de Arte Religioso. Integrado al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en 1940, tiene más de 80 años como museo.
Cuenta con un acervo de arte sacro de los siglos XVI a XIX, conformado principalmente por cuatro colecciones de antiguos conventos de la ciudad de Puebla: Santa Mónica (agustinas recoletas), Santa Catalina (dominicas), San Joaquín y Santa Ana (capuchinas) y La Soledad (carmelitas).
El Ex Convento de Santa Mónica es un inmueble del siglo XVII modificado en los siglos posteriores. En su arquitectura predomina el estilo Barroco poblano, observable sobre todo en las fachadas del Patio de Profesas, recubiertas con azulejo de Talavera y petatillo (ladrillos en ángulo, como costuras de petate). No obstante, la fachada principal de la calle 18 Poniente es de estilo neoclásico.
El museo reconstruye la vida de las religiosas a lo largo de 23 salas de exposición permanente y dos patios, el de Profesas y el de Novicias.
Además de su exposición permanente, en el Museo de Santa Mónica tienen lugar exposiciones temporales con reconocidos investigadores, así como talleres, conferencias, encuentros, presentaciones editoriales, conciertos, recorridos guiados, lecturas dramatizadas, sesiones de cuentacuentos y otras actividades culturales.
Cabe mencionar que en la ciudad de Puebla se fundaron numerosos conventos femeninos, como el de Santa Mónica: en 1688, el obispo hizo profesar allí a 24 colegialas bajo la orden agustina recoleta en el primer convento de esta congregación en América.
En suma, el Ex Convento de Santa Mónica es un lugar ideal para acercarse al conocimiento de la forma en que vivían las monjas de antaño. En 1935 se convirtió en el primer Museo de Arte Religioso del país.
