En Puebla hay sitios arqueológicos, sitios turísticos y edificios que destacan por su estilo barroco, pero también mucha historia y una de ellas es la que guarda la ex hacienda de Chautla o también llamado Castillo de Gillow.
Este lugar seguro ya lo conoces, o al menos en imágenes, ya que es una de las construcciones más instagrameables que se distingue por ser un palacio de cuatro torres hecho de ladrillos rojos con retoques en blanco y rodeado por un lago.
Su edificación es tan adelantada a su época que sigue llamando la atención de arquitectos, ingenieros y otros profesionistas.
Se encuentra en el municipio de San Salvador El Verde, entre los límites de Puebla con Tlaxcala y de acuerdo a diversos archivos históricos, la edificación se dio en el siglo XVIII, cuando el Rey Carlos III concedió a Manuel Rodríguez de Pinillos un extenso terreno de 6 mil hectáreas para que se creara una escuela agrícola, en 1777.
Con el paso del tiempo se trabajó en las tierras para cultivar, pero muy poco se hizo en a vivienda, hasta que la hacienda fue heredada a la Marquesa Soledad Gutiérrez de Rivero Martínez y Pinillos, nieta de Rodríguez de Pinillos.
La marquesa entones se casó con el inglés Tomás Gillow, pero esa unión duró poco tiempo y el señor Gillow decidió casarse con su propia hijastra, Mara Zalzava y Gutiérrez, quien heredó la hacienda.
De ese matrimonio surgió Eulogio Gregorio Gillow, quien nació en 1841, llegó a ser arzobispo de Oaxaca, luego de formarse académicamente en Inglaterra.
Se encargó de renovar la hacienda familiar y la idea original era tener un pequeño Palacio de Versalles, ya que su familia y ancestros pertenecían a la nobleza, así que optó por incluir instalaciones eléctricas, hermosos jardines y un lago artificial.
Al terminar esta obra fue que en 1848 el castillo ya llevó el nombre de Gillow.
Así estuvo operando y llegó a ser tan productiva que se posicionó como una de las grandes productoras de leche a nivel nacional.
Después vino el movimiento social de la Revolución Mexicana y la hacienda fue expropiada y fue hasta que el presidente Álvaro Obregón regresó la propiedad a manos de los herederos de Gillow.
Años más tarde, el sobrino de Gillow vendió la propiedad a la Secretaría de la Defensa y el gobierno de Puebla la adquirió posteriormente para convertirla en un complejo turístico.
Hoy este castillo puede ser visitado por el público en general, tanto para hacer recorridos como para eventos sociales, incluso para hospedarse en el hotel que es administrado por la cadena Misión.
La entrada tiene un costo de 40 pesos.
Está abierta al público de lunes a viernes de 8:00 a 17:00 horas y los fines de semana de 8:30 a 17:30 horas.
Además de conocerlo y tomar hermosas fotografías, puedes pasear en lacha, pescar, hacer, aventurarte en la tirolesa, paseo en bici y mucho contacto con la naturaleza.
Si deseas visitar la Ex Hacienda de Chautla, la opción más práctica es hacerlo en coche siguiendo la carretera federal a Puebla. Después de la primera caseta, debes tomar hacia San Martín Texmelucan, cruzar la Avenida Libertad Sur y 4 kilómetros después encontrarás la entrada.