En el Barrio de San Miguelito, en San Pedro Cholula, Puebla, se encuentra el Templo de San Miguelito considerado como el primero de este municipio. Se localiza muy cerca de la denominada “curva del diablo”, justo en la intersección de Bulevar Forjadores y la recta a Cholula.
Es común que en los barrios de San Pedro Cholula, la mayoría de los templos celebren cada 29 de septiembre a San Miguel Arcángel, una fiesta popular en honor a uno de los más importantes de los Arcángeles en las religiones judía, islámica y cristiana.
San Miguel es jefe de los ejércitos de Dios, encargado de brindar protección, se dice que él derrotó Satanás y a sus seguidores echándolos del cielo con su espada de fuego.
Una de las leyendas que albergan en este templo es la de un diablito de madera, que recobra vida y se escapa para cometer desgracias en el barrio.
Cuenta la leyenda que un día, de la nada, apareció la figura de un diablito tallada en madera, afuera de la iglesia de San Miguelito. Los habitantes que la encontraron no sabían cómo había llegado hasta ahí, algunos rumoraban que había sido desenterrada al confundirla con un objeto prehispánico y otros decían que era de un hombre que al darse cuenta de los poderes malignos que el diablito tenía, decidió mejor dejarlo en el templo para que ahí lo controlaran.
A su llegada al templo, el sacerdote decidió colocarlo dentro de una pequeña vitrina de vidrio y otra de madera para guardarlo dentro de la sacristía; sin embargo esta acción no fue fácil, se cuenta que a pesar de que las medidas eran exactas, este nunca cabía, hasta que a través de rezos especiales lograron apresarlo dentro de su actual caja.
Y así pasaron varios días, hasta que alguien se dio cuenta de que la caja se encontraba arañada, por lo que decidieron limarle las uñas a la figura.
En algunas ocasiones el diablito aparecía en otra posición dentro su caja y es cuando se decía que cobraba vida y se escapaba para provocar terribles accidentes.
Los habitantes del barrio mencionaban que desde que la figura estaba en el templo, los accidentes en la Curva del Diablo se habían incrementado, es por ello que la expresión “pareciera que el diablo anda suelto…” se hizo muy popular en esta zona.
Y si pensabas que todas estas historias alejarían a los fieles del templo, al contrario, se generó mayor devoción y curiosidad por la gente, ya que en vez de rezarle a San Miguel, el patrono de la iglesia, se le rezaba al diablito, afirmando que este les cumplía lo que le pedían, siempre y cuando tuviera que ver con dinero, amores, tragedias y venganza.
Actualmente el diablito se encuentra oculto y las personas que quieran visitarlo, antes deben encomendarse fervientemente a San Miguel Arcángel para que los proteja pues, de no hacerlo, la figura los puede puede "poseer" e irse dentro del cuerpo del visitante, de acuerdo con las versiones populares.
Se dice que a veces el diablito aparecía desatado de la columna y cuando esto pasaba en el pueblo ocurría algo malo, y era hasta que el padre o el sacristán lo volvían a atar que cesaban todos los males.
Hasta la fecha, la Iglesia de San Miguelito recibe a miles de turistas al año con el fin de corroborar que la estatua aún existe y comprobar todas las leyendas que se cuentan alrededor de ella.
¿Te atreverías a visitarlo?