Flotando sobre la superficie del agua del Lago Valsequillo se instaló una cabaña flotante con todas las comodidades, rodeada por un bello paisaje arbolado, desde donde se observan hermosos atardeceres y noches estrelladas.
Se trata de la cabaña Meraki, un sitio ideal para el romance a dos horas y media de Ciudad de México, donde se pueden elegir varias actividades de naturaleza, ya sea en el mismo lugar o en los alrededores.
Para hospedarse en la cabaña flotante en Valsequillo se debe reservar con tres meses de anticipación debido a la alta demanda.
Se deben reservar dos noches de hospedaje, como mínimo, y las tarifas son de 1,650 pesos por noche para dos adultos, de domingo a jueves; en fin de semana, 2,000 pesos.
La cabaña tiene capacidad para cuatro huéspedes; cada persona extra paga 280 pesos por noche.
Se puede reservar por la plataforma Airbnb, o bien al teléfono 2222933020 o bien al Whatsapp 2221436323.
La cabaña Meraki, a 5 minutos de Africam Safari, ha recibido especial atención de los turistas debido a su peculiar ubicación sobre el Lago Valsequillo, que en realidad es una presa.
La cabaña flotante fue construida con materiales y elementos reciclados como el acero, la madera estructural y con tambos flotadores, a través de técnicas antiguas para la conservación de la madera en el exterior.
“Nos basamos en el Shou Sugi Ban, una técnica japonesa en la que se quema la capa exterior de la madera para hacerla resistente a la intemperie; la aplicamos en todos los muros exteriores de la cabaña, además de aceite de linaza para sellar y protegerla aún más”, comentó Mariana Álvarez, encargada de la propiedad.
El huésped que se queda en esta habitación gozará de todas las comodidades y de absoluta privacidad.
“El planteamiento del diseño viene del concepto de experimentar un alojamiento único y poco convencional, conectando directamente a las personas con la naturaleza, tranquilidad y respiro de la ciudad, sin que les falte absolutamente nada”, explicó Mariana.
La cabaña flotante cuenta con dos camas matrimoniales, terraza con sillones exteriores, una terraza superior con comedor exterior, una minicocineta con vajilla completa, frigobar, tetera y microondas, TV, WiFi y baño. Los huéspedes pueden utilizar los kayaks cuando deseen sin costo extra.
Es importante que los huéspedes sepan nadar y puedan bajar y subir escaleras sin dificultad, si desean reservar este espacio.
Próximamente inaugurarán su segunda unidad flotante, Mangata.
Por el momento, hay otra cabaña en la propiedad que también se puede rentar. Es una habitación tradicional de 35 metros cuadrados, con vista al jardín y al lago.
En la propiedad, además de los paseos en kayak, los huéspedes pueden rentar motos acuáticas, solicitar un paseo en lancha al amanecer o al atardecer, hacer esquí acuático o tomar una clase privada de meditación o yoga.
También se puede solicitar una fogata con una duración de dos horas.
Si vas en pareja, se organizan cenas románticas que incluyen vino, fogata, decoración e iluminación. Esta y las actividades anteriores tienen un costo adicional.
En cuanto a lugares cercanos para visitar, Mariana recomienda ir a Africam Safari (a cinco minutos), a las cascadas de San Agustín Ahuehuetla y al centro de Puebla, a 30 minutos.
Valsequillo es una presa que fue construida en los años cuarenta para evitar inundaciones en algunos poblados de la región y proveer de agua a los campos de riego en las épocas de sequía.
El agua de este lago artificial viene del volcán La Malinche (en Tlaxcala), del río Atoyac y del río Alseseca.
Con información de EL UNIVERSAL
