Participar en una carrera no es un tema sencillo, incluso si se hace solo por diversión y con la plena conciencia de que no se alcanzarán los primeros lugares. Trotar o correr es una actividad que va más allá del esfuerzo físico, ya que conlleva deshidratación, aceleración del ritmo cardíaco, y el evidente riesgo de sufrir lesiones severas si no se está preparado mental y físicamente.
Por ello, inscribirse en una carrera deportiva, sin importar lo corta que sea la distancia, debe ser una decisión meditada, acompañada de la preparación adecuada en los planos físico y mental. Participar en una carrera implica mucho más que simplemente vestir ropa y calzado deportivo; los corredores, sin importar su edad, deben tener una condición física acorde con el esfuerzo que van a realizar.
Es necesario un entrenamiento previo que incluya ejercicios de calentamiento y respiración antes de la carrera, así como ejercicios de enfriamiento al finalizar. Todo debe basarse en el comportamiento del ritmo cardíaco de cada persona, además de una alimentación e hidratación adecuadas, para evitar calambres y desgarres musculares.
Lo recomendable es contar con una preparación constante y conocer la ruta a recorrer, transitándola, si es posible, a la hora en que se tiene contemplada la carrera. Sin embargo, lo más elemental es realizar un examen médico para determinar si se está en condiciones de participar, ya que las carreras atléticas, aunque sean con fines recreativos, no son aptas para personas sedentarias o para quienes no han incorporado la actividad física en su rutina diaria.
Por ello, en general, se habla de “runners” o corredores como atletas que se preparan de manera continua para participar en competencias deportivas, conscientes de la importancia de la preparación física y del descanso tanto antes como después de la carrera.
Consecuentemente, si se desea participar en una carrera deportiva, es recomendable comenzar a ejercitarse al menos con un mes de anticipación, en el caso de eventos cortos o recreativos, independientemente de la edad.
La práctica del deporte y la actividad física deben ser parte de los hábitos de vida.