Con forma de huellas caninas, un grupo de albercas naturales bautizadas como la Poza Pata de Perro, se ubica cerca del Pueblo Mágico de Cuetzalan.
Cuatro de ellas son pequeñas y la de mayor tamaño es la más profunda de todas, aproximadamente de cuatro metros. Su forma se debe a la erosión de la corriente de agua en las rocas.
Este lugar se encuentra cerca del Pueblo Mágico de Cuetzalan, en un bosque de neblina hay ojos de agua ocultos, cascadas y grutas.
El clima en la región es cambiante, con temperaturas cálidas en primavera y verano, pero durante la noche es frío y húmedo, al igual que en el otoño e invierno.
Hay piedras enormes esculpidas por el cauce del agua dulce que corre desde la profundidad de las cavernas para desembocar en un río.
El agua de estas albercas naturales en las que es posible refrescarse, proviene de un sistema de grutas subterráneas, alimentado por el río La Garganta del Diablo que también corre por el Cañón Sagrado.
El agua de estos caudales es pura y cristalina
Dónde se encuentra la Poza Pata de Perrro
La Poza Pata de Perro se encuentra cerca de Cuetzalan, en un lugar llamado Atmolón.
Aquí se localiza la comunidad de Ayotzinapan, desde donde hay que caminar 40 minutos para llegar a las albercas naturales con forma de huellas de perro y las maravillas que guarda este lugar.
Desde Ciudad de México son 326 kilómetros, o aproximadamente 5 horas y media de trayecto en auto.
Desde la ciudad de Puebla son 10 kilómetros, o 3 horas de trayecto.
Qué hacer en La Poza del Perro
El sitio es ideal para caminatas para descubrir este paraíso geológico modelado por el agua.
Se tiene que andar a pie varios kilómetros desde Ayotzinapan para llegar a la poza.
El estará lleno de subidas muy inclinadas rodeadas de paisajes cubiertos de vegetación, como árboles de oyameles, pinos, cedros y encinos.
Durante el camino, es posible encontrarse varios insectos, además de armadillos y conejos silvestres.
Se recomienda usar un calzado y ropa cómodos que permitan desplazarse con facilidad a través de las piedras, lodo y agua.
Se recomienda caminar a un ritmo constante y con precaución, pues el sendero es largo y tiene una superficie pedregosa.
Lo mejor es contratar los servicios de un guía experimentado.
También se puede visitar la Cueva del Cántaro, un escenario estrecho y oscuro en el que se tiene que pasar un tramo a pecho tierra, por lo reducido del espacio.
La Garganta del Diablo es otra parada obligatoria: se trata de una gruta con un río subterráneo.
En su interior hay grandes estalactitas y se puede escuchar el relajante sonido de la corriente de agua que fluye de manera oculta en las paredes de la gruta.
A la intemperie está el Cañón Sagrado, donde corre agua turquesa y cristalina que cae una pequeña cascada, ideal para nadar y tomar fotos.
Se cuenta que en la antigüedad los nahuas depositaban en este cañón sus ofrendas y rendían tributo a los dioses por las buenas cosechas.
Para visitar las pozas es necesario ir con un guía o touroperador que conozca el camino y, sobre todo, las grutas, para evitar cualquier inconveniente y disfrutar el viaje.
Se ofrecen tours guiados en paquetes con guías certificados.
Quién lleva a la Poza Pata de Perro
Descubre Cuetzalan: Tel. (233) 33 1 1234, 233 102 6074 y 233 759 6714. Dar clic para entrar a su sitio web.
Visit Cuetzalan: Tel. 233 33 10541, 233 101 2955 y 233 108 6783. visitcuetzalan.com. Encargado: Orlando Tirado González.
Ruta Balam (lleva desde la Ciudad de México): rutabalam@gmail.com. Cel: 56 1259 6488. También se pueden encontrar en Facebook y en Instagram