Las carmelitas descalzas son una orden religiosa que custodia la receta de los chiles en nogada y preparan la auténtica cocina de convento para sufragar los gastos de su congregación.
Su sede se encuentra en el Monasterio de Nuestra Señora de la Soledad, ubicada en Calzada del Farol 80, Fracc. Santa Cruz Guadalupe, en la ciudad de Puebla.
Las hermanas carmelitas descalzas preparan alimentos en su convento desde hace 15 años y durante el mes de agosto cocinan su receta tradicional de chiles en nogada.
La hermana Elizabeth Guadalupe de la Santísima Trinidad es la cocinera del convento y responsable de la custodia de la receta de chiles en nogada.
El platillo de inspiración barroca lo preparan con manzana panochera, pera de leche, durazno criollo y nuez de castilla, ingredientes obtenidos de la región de San Andrés Calpan y Huejotzingo.
Son 17 religiosas las que cocinan en el Monasterio de la Soledad y a cada una de ellas le corresponde hacerlo un día.
“La cocina es cariño, es amor”, cuenta en entrevista la hermana Clara Eugenia de la Inmaculada, profesa de votos perpetuos, en una entrevista para Desde la Fe, el órgano de comunicación de la iglesia Católica.
Señaló que la receta se ha heredado desde sus "hermanas mayores", y que la cocina se transmite de generación en generación.
Explicó que el secreto de los conventos para preservar las recetas durante generaciones consiste en la dinámica de anotar las recetas en libretas que se van transmitiendo con el paso de los años.
Agregó que la receta de los chiles en nogada tiene una antigüedad de al menos 100 años, pues sus registros se perdieron en las exclaustraciones que sufrió la comunidad, en los tiempos de la persecución religiosa.
El Monasterio de la Soledad fue fundado el 26 de febrero de 1748 y, desde entonces, la cocina se ha convertido en parte fundamental de su vida diaria.
Además de los chiles en nogada, preparan rompope, campechanas y, durante la temporada navideña, roscas de naranja, cochinitos de panela, merengues, cacahuates y nueces garapiñadas, buñuelos y polvorones sevillanos.
Este año 2022 es el año jubilar de esta orden religiosa y en febrero de 2023 celebrarán los 275 años de su fundación.