En la capital de Puebla existen túneles en el centro y fueron utilizados hace más de 500 años.
Pero hay otros municipios del estado donde también hay pasadizos, los cuales servían para comunicar de un punto a otro.
Tal es el caso del Pueblo Mágico de Atlixco, donde sus habitantes aseguran que existen túneles secretos en el centro de la ciudad.
De acuerdo con el libro Mitos y leyendas de todo México, escrito por de Homero Adame en 2010, los habitantes más antiguos de Atlixco aseguraba que estos pasajes conectaban el convento de San Francisco, la parroquia de Santa María de la Natividad, el Carmen, Santa Clara, y que todas las ramificaciones se unen abajo del templo de San Agustín.
Incluso hay historias que aseguran que estos túneles existieron desde antes de la Revolución Mexicana, pues se dice que los zapatistas llegaron al municipio de Atlixco con intenciones de saquear la ciudad.
Entonces las familias más adineradas de la región, como sabían que estaban matando a todos los ricos, se trasladaron al convento de San Agustín para resguardarse de los saqueadores.
Luego de que el sacerdote cerrara las puertas del convento, uno de los bandidos, descubrió que había mucha gente escondida en el convento, por lo que dio aviso a su comandante, señalando que estás personas estaban reunidas con todas sus pertenencias.
Horas más tarde, el comandante que traía a esos bandoleros ordenó que tumbaran la puerta y mataran a todos los escondidos
No obstante, en el momento en el que tiraron la puerta, no encontraron a nadie dentro del convento y nadie supo por dónde se habían escapado.
Este suceso suscitó que naciera la leyenda de los túneles de Atlixco. Pues se dice que estas personas se metieron por los túneles y salieron hasta el otro lado de la parroquia, guiados por el padre que conocía el camino perfectamente.
Algunos moradores aseguran haber ingresado a estos túneles, pero ninguno, por temor, los terminó de recorrer.
Hasta el momento, no existe ninguna evidencia que corrobore la existencia de esos túneles secretos.
Sin embargo, podría pasar como con el templo prehispánico de Atlixco que por años fue una leyenda, y cuya existencia fue confirmada en este 2023 por arqueólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
En este caso, la leyenda se hizo una realidad.