Previo a participar en un foro sobre violencia ácida en el Congreso del estado, la saxofonista María Elena Ríos Ortiz, víctima de este tipo de ataques y ahora activista, hizo un llamado a que en Puebla los diputados avancen en las sanciones al tipificar el delito.
Acompañada por la legisladora del Partido Acción Nacional (PAN) Aurora Sierra Rodríguez, quien ha hecho una de tres propuestas sobre el tema en el Poder Legislativo local, destacó las desventajas de considerar los ataques sólo como lesiones y no como tentativa de feminicidio.
"Un logro verdadero va a ser cuando se tipifique en cada estado, se tipifique en la federación, existan penas o castigos ejemplares porque esto también entra en las medidas de no repetición, que se de una reparación adecuada del daño a las víctimas", dijo.
De acuerdo con Ríos Ortíz, abordar la violencia ácida desde las leyes estatales es una tarea que implica una visión multidisciplinaria que no incluya solo a los expertos en legislación sino a otros especialistas del sector salud.
Asimismo resaltó que se necesita que al modificar las leyes se tomen en cuenta los mecanismos de remediación adecuados pues los tratamientos son caros, la reinserción social de las víctimas es difícil y también se afecta su entorno familiar.
Una vez que existan las reformas, agregó, se necesita también de coordinación de todos los niveles de gobierno pues muchas veces son los mismos funcionarios de las fiscalías los que no tienen perspectiva de género a pesar de llamados de organismos sobre derechos humanos.
"Dentro de los puntos a recomendar siempre es que se capaciten con perspectiva de género, cosa que jamás lo hacen porque no tienen la disposición, porque les da flojera y a pesar de que se tiene un presupuesto no lo utilizan y no sé a dónde se va", agregó.
El caso de Ríos Ortiz ha sido uno de los más significativos en el país pues hace tres años y dos meses fue atacada en un acto coordinado por su expareja, el exdiputado del Partido Revolucionario Institucional (PRI) Juan V.
La víctima ha señalado en varias ocasiones que aún falta detener a uno de los involucrados en el ataque y que otros implicados detenidos, incluyendo al político, han logrado amparos por sus nexos con el poder.