Luego de que un grupo de coordinadores regionales del Partido Revolucionario Institucional (PRI) acusaran un adeudo de un millón 40 mil pesos en pagos, la dirigencia estatal expuso que desde el inicio acordaron liquidarlos el 28 de agosto.
De acuerdo con información del comité tricolor en la entidad, hasta ahora se han cumplido otros acuerdos relacionados con la prestación de servicios que 52 integrantes de su estructura que colaboraron durante la campaña y la jornada electoral.
Los quejosos argumentaron la mañana de este miércoles que ellos no formaban parte de la nómina, pero que habían sido solicitados para el proceso electoral a fin de realizar funciones como el cuidado del voto.
Según los inconformes, se acordó con el dirigente Néstor Camarillo un pago de 50 mil pesos por persona, de los cuales hasta ahora se han pagado 20 mil.
Ante ello, el área de comunicación del partido informó la fecha límite acordada, negó las acusaciones y aseguró que la Secretaría de Acción Electoral atenderá este asunto.