Al inicio de cada octubre, la Ley de Ingresos Municipal es un tema que genera controversia entre alcaldes, regidores y diputados, sin embargo a quienes más involucra es a los ciudadanos.
Entre otras razones, se debe a que en ese documento se prevén las fuentes de ingresos con la que gestionarán los gobiernos municipales en el siguiente año y que incluyen cobros para los habitantes y recursos de beneficio público.
La Ley Orgánica Municipal de Puebla prevé que el documento sea planteado al interior de los cabildos y que se entregue a más tardar el 15 de noviembre para que se analice en el Congreso del estado.
Una vez ahí, se turna a las comisiones a cargo de revisar las finanzas públicas y después se lleva a votación al pleno para que se publique hacia el final del año .
Por los tiempos del Poder Legislativo, esto debería ocurrir antes del 15 de diciembre, sin embargo, en la práctica su votación final puede llevarse a sesiones extraordinarias como sucedió el año pasado y como se prevé que pase la próxima semana.
En estos dos años, la causa del retraso en la discusión ha sido la inclusión del cobro por Derecho de Alumbrado Público (DAP) en los municipios que así lo solicitan en sus leyes de ingresos.
Una definición sencilla y práctica sobre lo que es la Ley de Ingresos Municipal se observa en el portal del ayuntamiento de Puebla que cuenta con ficha de consulta sobre la legislación que le involucran.
"Establecer los montos, conceptos y criterios de los diversos ingresos que podrá percibir el H. Ayuntamiento del Municipio de Puebla, durante el Ejercicio Fiscal de 2022", es el objetivo del documento vigente de acuerdo con la página de la comuna.
Asimismo, se enlista el contenido de la ley con siete títulos, entre los que están los impuestos -siendo el predial uno de ellos-; las contribuciones, los derechos, los productos, los ingresos extraordinarios y los estímulos fiscales.
