En ese momento, López Obrador era dirigente del PRD y una figura que ya comenzaba a apuntalarse para las próximas elecciones.
Cuando Cárdenas decidió dejar la jefatura de Gobierno para las elecciones presidenciales, Rosario ocupó el cargo temporalmente y fue en ese momento en el que conoció al empresario argentino Carlos Ahumada.
El argentino se convirtió en un personaje cercano a Rosario Robles y a otros personajes del gobierno posterior, el de López Obrador, quien se convirtió en jefe de Gobierno en las elecciones del 2000.
Ahumada era dueño del Grupo Quartz, al que pertenecía el periódico "El Independiente". Además, compró los equipos de futbol de primera división León y Santos. Sin embargo, años después fue acusado en Argentina de tener nexos con los cárteles de Sinaloa y de Tijuana, y hasta de tráfico de efedrina.
Ahumada se convirtió en una pieza clave en el 2004, cuando en los primeros días de marzo, Televisa, a través de los programas de Joaquín López Dóriga y "El Mañanero" de "Brozo", transmitió videos en los que se exhibía a Gustavo Ponce, secretario de Finanzas de López Obrador, y a René Bejarano, el operador político del jefe de Gobierno.
A ese momento de la historia política contemporánea se le conoce como "los videoescándalos", los cuales eran grabados por Ahumada para utilizarlos en el mejor momento en contra del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, quien era uno de los posibles candidatos presidenciales, según las versiones del mismo argentino.
Ahumada reveló que mantuvo una relación sentimental con Rosario Robles, quien participó en la filtración de los videoescándalos. El empresario argentino contó en su libro "Derecho de Réplica" que la exaliada de Cárdenas acudió a la casa de Carlos Salinas de Gortari cuando Ahumada le presentó los videos al expresidente.
En otra de las confesiones de Ahumada dice que en una de las reuniones en las que se acordó la difusión los videoescándalos, participaron entre otros, Diego Fernández de Cevallos, y Juan Collado, como representante legal de Raúl Salinas de Gortari. Collado, hoy en día está vinculado a proceso por lavado de dinero y delincuencia organizada.
Tras la difusión de los videos, AMLO siempre acusó un complot en su contra.
Robles esperó afuera del salón en el que Ahumada y Salinas vieron los videos de Bejarano y Ponce, aunque también se sumaron los de Carlos Ímaz, exesposo de Claudia Sheinbaum, y de Ramón Sosamontes, cercanos a Robles y quienes fueron citados a declarar junto con ella en aquel momento.
Ahumada contó que Robles estaba "obsesionada" con ser presidenta, incluso, cuenta en dicho libro, que Salinas le colocó una banda presidencial a Rosario en su casa de las Lomas.
Aquellas revelaciones terminaron por separar a Rosario de Andrés Manuel.
Incluso, Rosario Robles se alejó de la izquierda y se acercó al priismo, con el cual llegó a ser dos veces secretaria en el gobierno de Enrique Peña Nieto, tiempo en el que según las acusaciones, hubo un desvío de recursos en la Sedatu para realizar la "estafa maestra".