El Congreso de Puebla se caracterizó en 2022 por no presentar ni una sola iniciativa de decreto proveniente de la entidad en el Congreso de la Unión, con lo que se desaprovechó una de las facultades previstas por ley para modificar la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y leyes generales desde los estados.
De acuerdo con el Sistema de Información Legislativa (SIL) a cargo de la Secretaría de Gobernación federal, de las 2 mil 377 iniciativas presentadas este año en San Lázaro, 77 provienen de congresos estatales, 18 del Poder Ejecutivo y el resto de los partidos.
Entre las propuestas que surgieron en los congresos estatales, destaca a la cabeza el Congreso de Jalisco con 16 iniciativas, le sigue el de Nuevo León con 14 y el de la Ciudad de México con 10.
Los congresos de Baja California Norte y Chihuahua coinciden con siete cada uno; el Congreso de Michoacán presentó cinco; los de Hidalgo y Sonora, cuatro cada uno y el Poder Legislativo de Aguascalientes presentó tres.
Por otro lado, con una iniciativa por Congreso están los de Baja California Sur, Coahuila, Colima, Estado de México, Guanajuato, Oaxaca y también el de Tamaulipas.
Estas iniciativas buscan reformas tanto a la Carta Magna mexicana como a otras leyes que abordan temas variados como la seguridad nacional, la educación, los monumentos históricos, el sistema aeroportuario, entre otros.
Aunque se llevó al pleno una iniciativa de Puebla, se retrasó su análisis tras turnarse a comisiones y ya no prosperó.
Se trata de una reforma a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos que busca disminuir la jornada laboral máxima a seis horas y que fue elaborada por la diputada Laura Zapata Martínez del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en junio.