El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, dedicó la misa dominical a las recientes víctimas de la violencia en Puebla.
En la ceremonia realizada en la Catedral, recordó al menor Tadeo encontrado en el penal de San Miguel, así como los asesinatos de la menor María Isabel y de la joven Liliana Lozada.
"Yo quiero unirme en oración a estas familias que han sufrido. Tenemos el caso del bebé Tadeo, encontrado en un contenedor de basura, muy triste y muy lamentable. Tenemos el caso de dos personas secuestradas, ultrajadas, asesinadas, una niña, María Isabel y una jovencita, Liliana Lozada", resaltó.
Aunque no se trata de casos poblanos también hizo mención a los asesinatos de los periodistas Lourdes Maldonado, José Luis Gamboa y Margarito Esquivel.
Por otro lado, pidió una oración para Iván, Roberto Ochoa, Griselda Rosales y Rocío Pérez, fallecidos esta semana tras la explosión de un tanque de gas en la Diagonal Defensores de la República.
Durante su homilía Sánchez Espinosa recordó que la Biblia llama a los fieles a denunciar las injusticias y luchar contra el egoísmo.
“Hoy vivimos en medio de una sociedad injusta, violenta, en donde actuamos como si no viéramos ante las situaciones de violencia e inseguridad. Es como si dijéramos que cada quien se rasque con sus propias uñas", señaló.
El arzobispo también hizo oración en memoria de José Gali Hatuni, padre del ex gobernador Tony Gali Fayad.