Al término del último periodo ordinario de la LX Legislatura, el Congreso del Estado aprobó 15 reformas propuestas por el gobernador Miguel Barbosa Huerta.
El sí de la mayoría de diputados, supone que cada 47.5 días accedieron a nuevas leyes, adecuaciones y hasta adiciones.
En la mayor parte de los casos, las propuestas se palomearon a los pocos días de presentarse y sin amplio espacio para su discusión.
Una de las primeras adecuaciones se observó en la Ley Orgánica de la Administración Pública, para concretar el tipo de organización de gobierno propuesta por el mandatario
También en 2019 aprobaron una reforma al Código Civil que fue polémica por no considerar el matrimonio igualitario; otra más para incrementar el Impuesto Sobre la Nómina (ISN), y un gravamen al impuesto de hospedaje con reservas mediante aplicaciones.
Hacia mayo de 2020 hubo una modificación a la Ley de Educación que previó la fiscalización a instituciones y que se aprobó en comisiones tres días después de su envío.
Ese año también aprobaron prohibir propaganda electoral en transporte público y pendones; reformas relacionadas con el Seguro Popular; el presupuesto de 2021 y la regularización de los predios urbanos.
Durante el 2021, aprobaron sancionar la venta de vacunas falsas; la Ley del Notariado para el Estado de Puebla y un posterior parche para endurecer los requisitos para ser notario, así como modificaciones en la estructura de la policía.
Aunque el período ordinario ya terminó, en la recta final de la LX Legislatura, también se recibió una propuesta del Ejecutivo en materia de desaparición de personas, la cual se suma a la que ya existía en el Congreso, que fue impulsada por activistas y académicos y que no se discutió.
