El pasado 27 de julio, Josefina Morales Guerrero, secretaria de Planeación y Finanzas del gobierno de Puebla, dio a conocer que la gestión de Sergio Salomón Céspedes Peregrina pagó un crédito fiscal por 2 mil 609 millones de pesos que se le debía al Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Sin embargo, también se informó que Puebla seguía debiendo 722.3 millones de pesos a la autoridad fiscal federal, por el pago del Impuesto Sobre la Renta en sueldos y salarios del gobierno del estado de Puebla.
Dicha deuda corresponde a los años 2019 y 2020 que gobernó el extinto Miguel Barbosa Huerta, siendo María Teresa Castro Corro la titular de la Secretaría de Planeación y Finanzas estatal.
Pero los poblanos se despertaron este lunes 31 de julio de 2023 con la noticia de que el hoyo financiero que dejó Barbosa Huerta en realidad es de 25 mil 275 millones de pesos.
Lo anterior se conoció a través de una publicación hecha por el columnista Alejandro Mondragón, quien detalló el daño patrimonial que tiene un impacto directo en el ejercicio de los recursos para los años por venir.
En la publicación titulada “Socavón financiero por 25 mil 275 mdp, el legado barbosista” desglosa las cifras que se obtuvieron tras revisar las cuentas públicas de los periodos 2019, 2020 y 2021 de la gestión de Barbosa Huerta y que fueron ya aprobadas por el Congreso del Estado y validadas por la Auditoría Superior de Puebla.
A continuación, se replica el detalle de los adeudos que señala el periodista Alejandro Mondragón:
1.- La Secretaría de Planeación y Finanzas no ha solventado ni comprobado observaciones por un monto superior a los 10 mil 500 millones de pesos correspondientes a los procesos de fiscalización de los recursos federales que realiza la Auditoría Superior de la Federación de los años 2012 al 2021, conforme el Sistema Público de Consulta de Auditorías de la propia Auditoría Superior de la Federación.
Tan solo en el año 2020 falta la comprobación de 412 millones de pesos.
2.- En el año 2021 existen 682 millones de pesos de Servicios Personales (gasto corriente, sueldos y salarios) que se financiaron con participaciones federales y se encuentran en proceso de solventación y justificación, a cargo de la propia Secretaría de Planeación y Finanzas, a pesar de ser una ilegalidad sancionada por la Auditoría Superior de la Federación.
3.- La falta de capacidad técnica y administrativa para ejecutar proyectos y programas gubernamentales del barbosismo se confirma con la información disponible de la cuenta pública, donde se indica que entre 2019 y 2021 se registró un subejercicio de recursos por 9 mil 853 millones de pesos.
4.- Se perdieron 600 millones de pesos en septiembre del 2021 por invertir los recursos públicos en Banco Accendo, institución que quebró tres meses después de recibir los fondos.
Esta transacción no se registró en la cuenta pública del 2021, la cual ya fue aprobada por el Congreso del Estado y avalada por la Auditoría Superior de Puebla.
5.- Se pagaron 2 mil 700 millones de pesos por un juicio que se perdió ante el Servicio de Administración Tributaria desde el 2015, sin que hasta ahora haya sanciones para los implicados.
6.- Por omisiones de Castro Corro, en el cálculo del Impuesto Sobre la Renta se generó un crédito fiscal por 722 millones de pesos, entre 2019 y 2020.
“La suma de todas las cantidades arroja un hoyo financiero en la gestión de Luis Miguel Barbosa por 25 mil 275 millones de pesos”, se lee en el artículo.
El columnista señala que este daño financiero al patrimonio entre 2019 y 2021 es cinco veces mayor que el presupuesto anual del Ayuntamiento de Puebla.
También evidencia que Castro Corro jamás explicó cuáles fueron los programas de bienestar afectados por el subejercicio, ni señaló quiénes son los responsables de la falta de acción gubernamental y tampoco dijo por qué no respondió a las observaciones de las instancias fiscalizadoras.
Cabe recordar que María Teresa Castro Corro presentó su renuncia como titular de la Secretaría de Planeación y Finanzas el pasado 26 de junio, cargo que fue ocupado por Josefina Morales Guerrero.
