Tras un proceso electoral conflictivo para renovar la dirigencia del Partido Acción Nacional (PAN) en Puebla, Augusta Díaz de Rivera Hernández rindió protesta este lunes con llamados a la unidad.
La nueva líder blanquiazul reconoció que la participación de todos los panistas es importante para vencer al principal enemigo que es el autoritarismo del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
"Nada nos va a dividir a los panistas, todos tenemos que estar juntos para poder resolver el reto que tenemos enfrente", dijo en el acto realizado en las instalaciones del Comité Directivo Estatal (CDE).
La dirigente reconoció como un buen primer paso para la unidad que en la entrega de estafeta participara Jesús Giles Carmona, a quien se le reconoció como cercano a su rival, Genoveva Huerta Villegas.
Asimismo, dijo que extiende la mano a los integrantes y simpatizantes de la planilla contrincante para emprender un diálogo que beneficie a los proyectos del panismo.
Como representante del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) estuvo presente el secretario General Adjunto, Juan Carlos Martínez Terrazas, quien destacó el reto de regresar al PAN al poder.
"El reto fundamental que tiene Augusta es que Puebla se vuelva a vestir de azul y estamos convencidos de ello porque conocemos su trayectoria", dijo.
El represente nacional también recordó que se peleó contra otra planilla y coincidió en que el objetivo ahora es que trabajen en unidad.
Desde la comisión a cargo de organizar la elección se expuso que con el reconocimiento de los resultados por parte del CEN a favor de Díaz de Rivera Hernández se daba por concluido el proceso.
