Un grupo de activistas se manifestó este jueves 18 de enero a las afueras del Congreso del estado para exigir que se tipifique como delito y se sancione con prisión la zoofilia en Puebla.
El tema cobró relevancia el año pasado tras conocerse el caso de dos perritas de Atlixco y fueron activistas quienes llevaron la propuesta al Poder Legislativo.
Sin embargo, ahora se reavivó con el caso de Mila, la yegua de Coronango cuya golpiza fue captada en video y tras su rescate y una serie de análisis se determinó que también fue víctima de abuso sexual.
De acuerdo con Elena Larrea, activista del santuario de caballos maltratados Cuacolandia y quien colaboró con autoridades para el rescate, esto fue identificado a las primeras valoraciones médicas.
El animal, dijo, tiene maltrato por falta de alimento, por sobreexplotación, pero también hay evidencias de desgarramientos internos de la vulva y zona perianal, lo que sugiere la zoofilia.
"Esto no puede ser posible y no lo podemos permitir como sociedad, tenemos que demostrar que estamos inconformes, que no vamos a permitir que se abuse de esta manera tan cruel", dijo.
La activista hizo énfasis en que los diputados ya tienen una propuesta para penalizar hasta con ocho años de prisión el abuso por zoofilia al modificarse el Código Penal del estado.
El tema se ha retrasado y lamentan la falta de voluntad de los diputados al no considerarlo un asunto prioritario.
Al final, dijo Elena Larrea, no solo están en riesgo los animales sino el tejido social por los daños que las personas que cometen zoofilia podrían realizar con quienes les rodean.
"No les cuesta un peso, no estamos pidiendo nada, solamente justicia para los animales y prevenir que estas personas que son un peligro para la sociedad realicen después estos actos con los humanos", agregó.
