Tras meses de jaloneos y negociaciones dentro y fuera de su partido, Morena, la jefa del Gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum, logró imponerse ayer en una pálida victoria contra la impunidad del caciquismo corruptor en la ciudad, que tiene en el todavía diputado federal Mauricio Toledo una de sus encarnaciones más escandalosas.

Una montaña de evidencias sobre manejos con dinero público, cinco meses de espera y que se librara un periodo completo de sesiones legislativas fueron necesarios para romper un pacto de encubrimiento y determinar, por fin, la declaratoria de desafuero de Toledo. La Comisión Permanente del Congreso debería convocar a un periodo extraordinario para concretar la determinación. Quizá será necesario esperar a septiembre para que la justicia le eche mano, junto quizá con otros compañeros de curul.

De cualquier suerte, este episodio termina por enterrar la ascendencia de Toledo sobre la ahora alcaldía de Coyoacán, que presidió de 2015 a 2018 bajo la ascendencia del entonces gobernante capitalino Miguel Mancera y sus operadores. Él se rotó en cargos diversos por cuatro elecciones y mantuvo al frente de los manejos locales a personeros que velaron por sus negocios, según imputaciones judiciales en su contra. En los comicios de junio un electorado harto hizo ganar en esa comuna a una coalición opositora encabezada por el PAN, que llevó como abanderado al casi desconocido empresario Giovani Gutiérrez. 

La comisión que manejó el caso de desafuero arrastrando los pies es encabezada por el diputado morenista Pablo Gómez. Desde enero pasado la Fiscalía de la ciudad le presentó un expediente con cuentas bancarias y títulos de propiedad de residencias y departamentos propiedad de Toledo Gutiérrez. Él cumplió 41 años el mes pasado, pero nunca ha tenido un empleo ajeno a la política. A ella se dedica desde los 20, incluso antes, si se consideran sus tiempos de agitador en ámbitos universitarios.

Entre 2012 y 2019, los registros arrojan que recibió sueldos por 9.4 millones, pero para el último de esos años contaba con propiedades inmobiliarias por al menos 35 millones, sin incluir prestanombres. La autoridad considera que es el caso de una casa cateada en junio de 2021 que se halla a nombre de un hermano.

La señora Sheinbaum no debió lidiar sólo con la apatía de la Cámara de Diputados, sino con un oscuro acuerdo sellado por el actual dirigente de Morena, Mario Delgado, en febrero de 2019. Entonces era el coordinador de su fracción, y logró la renuncia de ocho diputados al PRD para contar con sus votos en temas cruciales. Entre ellos se contaban, entre otros, el coordinador mismo perredista, Ricardo Gallardo Cardona, denunciado por la UIF por lavado y nexos con el crimen organizado, pero virtual ganador de la gubernatura de San Luis Potosí; Héctor Serrano, hombre fuerte en el gobierno del citado Miguel Ángel Mancera, y Mauricio Toledo.

Apuntes:

“Asúmase (defínase)… la historia no nos permite esos tipos de cobardía”, desafió en un tuit al presidente López Obrador el hijo de Daniel Ortega, el dictador de Nicaragua que puso como vicepresidenta y eventual sucesora a su esposa, Rosario Murillo, un personaje de novela, enajenada con el espiritismo. Juan Carlos Ortega Murillo, sus padres y socios han sido acusados por el gobierno de Estados Unidos de lavado de dinero. Su mensaje aludió a la decisión del canciller Marcelo Ebrard de llamar a consultas al embajador Gustavo Cabrera, al tiempo que Argentina hacía lo propio. Maximiliano Reyes, subsecretario para América Latina, publicó otro tuit: “La valentía siempre ha estado del lado de la libertad; la cobardía es la aliada de la represión…”.