Este día se supo del lamentable asesinato de la esposa del alcalde y presidenta del DIF Municipal de San Andrés Calpan, Adela Guadalupe Castellanos, cuando conducía su camioneta sobre la autopista México-Puebla, a la altura de Santa Rita Tlahuapan.

La Fiscalía General del Estado ya investiga los hechos y aunque en principio se manejó la versión de un posible asalto, no se descarta el móvil del ataque directo, por lo que llamó a declarar a varias personas, incluyendo al presidente municipal, Fernando Castellanos, quien se presentó de manera voluntaria.

Cabe mencionar que es la segunda presidenta de un DIF Municipal que fallece en hechos violentos en este 2024, pues apenas el 23 de junio pasado, fue asesinada María Elianet Sandoval Castillo, quien estaba a cargo del DIF de Acteopan.

En este caso, se señaló a su esposo, el presidente municipal, Álvaro Tapia Castillo, como el responsable del homicidio, pues las evidencias indicaron que tras discutir con su pareja, la bajó del auto en el que viajaban y la arrolló.

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Las negociaciones entre la empresa Volkswagen y la representación sindical en Puebla se desarrollan de manera sigilosa y ahora con la novedad de que la empresa podría cerrar plantas en Alemania para ahorrar costos.

Aún no hay datos sobre la situación actual de las negociaciones, pero sobre todo de la validación del resultado de la votación por parte de la autoridad laboral.

En tanto, el suspenso se mantiene. La reanudación de las negociaciones llevará a nuevo planteamiento que en su caso deberá ser nuevamente puesto a consideración de la base sindical. Un escenario similar al que vivió recientemente Audi.

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La próxima colocación de radares para detectar a quienes no han verificado o que contaminan ostensiblemente ha sido toda una sorpresa.

En el fondo, prevalece el interés por el respeto al medio ambiente y la reducción de contaminantes que debe ser adoptada por todos los ciudadanos.

Se trata de una medida que comenzará a aplicarse para meter en cintura a los morosos e indiferentes y de paso permitirá sacar de circulación los vehículos que, por sus condiciones mecánicas, llegaron al término de su vida útil. Pero ojalá que la medida incluya a las unidades del transporte público y a los vehículos oficiales que se pasean por las calles echando humo negro o café.

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